Los diarios Gara y Berria publicaron ayer una carta en que la organización terrorista ETA reivindica los atentados que le han sido atribuidos desde el pasado 19 de junio, en Arrigorriaga, y hasta el 30 de julio, en Mallorca. Las diversas acciones de la banda en estos días han costado la vida a tres personas.

ETA no cita expresamente a los dos agentes de la Guardia Civil fallecidos en Mallorca, pero en cambio tiene palabras contra el inspector asesinado en Arrigorriaga, Eduardo Puelles, a quien le niega carácter de víctima: para ETA, "era un eslabón de la imposición de la represión y de España".

El comunicado de ETA reta al ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, a quien advierte que "lo único que se ha demostrado ´frustrado´ y estéril en estas últimas semanas, como en los últimos años, es la estrategia represiva y las vías policiales" contra el terrorismo vasco. Rubalcaba había considerado de que el atentado realizado en Burgos –un día

antes de la bomba mortal de Palmanova– había sido "frustrado".

Nuevamente la banda se burla de las fuerzas de seguridad del Estado, recordando que la furgoneta que hizo estallar en aquella localidad "estuvo aparcada durante medio día y cargada de explosivos en el parking del cuartel más grande que tiene la Guardia Civil en las inmediaciones de Euskal Herria" pese a ser "el vehículo que todas las policías han estado buscando y que ha aparecido en la prensa en los últimos tres meses".

En otras de sus diatribas contra las fuerzas políticas democráticas, ETA carga también con los nacionalistas del PNV y NaBai, a quienes desafía a "poner esos ´vivas´ a la Guardia Civil y a España en sus programas electorales".

Acusa al fin a Rubalcaba de propiciar la muerte de los agentes: "cuando dice que el atentado fue ´frustrado´, confunde su deseo y el de ETA", pues "quisiera ver muertos a familiares de guardias civiles y niños" para perjudicar a la banda.

Insiste el comunicado que la banda "no quiere imponer ningún proyecto, como repiten los mandatarios españoles", sino que lleva buscando una "solución política y dialogada".

ETA sostiene que su objetivo es dar cauce a "un proceso democrático que supere la opresión de Euskal Herria".