El día que detuvieron a su inestimable amigo Damià Amengual, a la ex consellera Rosa Puig casi le da un soponcio, y no paró hasta que el PP le encontró abogado. Ambos de Algaida, durante su etapa conjunta en el Govern Matas todo quedaba en casa. Ahora, Amengual parece que no quiere repetir la desagradable sensación de ir esposado. Mejor tirar de la manta ¿no?. u