Damián Amengual, el ex gerente del consorcio Turisme Jove, apuntó directamente a la ex consellera de Presidencia, Rosa Puig, en una serie de facturas falsas por las que se abonaron 120.000 euros que se pagaron por unos viajes al extranjero que no se disfrutaron. Amengual también acusó al que fuera su jefe inmediato, el ex director general de Juventud, Juan Francisco Gálvez. Afirma que le ordenó pagar estas facturas y se encargó de tramitar una transferencia especial desde la Conselleria al consorcio para hacer frente a este dispendio.

Aunque las facturas aparecen a nombre de Turisme Jove, el ex gerente afirmó que no sabe a qué concepto respondían e ignoraba si alguien realmente viajó a cuenta del dinero público. Sin embargo, la fiscalía Anticorrupción cree que se trata de facturas falsas, que se abonaron a empresas francesas y portuguesas, teóricamente para financiar el viaje de un grupo de jóvenes de Balears, pero que estos desplazamientos no llegaron nunca a realizarse. Por tanto, este dinero se habría utilizado para otro fin, posiblemente ilícito, aunque todavía por aclarar.

Expediente

A pesar de las acusaciones del que fuera su subordinado, Gálvez negó que hubiera ordenado estos pagos. Afirma que se abonaron por iniciativa de Turisme Jove, pero aclaró al juez que quien tenía potestad para transferir una partida extraordinaria era la consellera Puig, aunque antes debía superarse un expediente administrativo fiscalizado por la Intervención del Govern.

El ex gerente de Turisme Jove, Damián Amengual, que pasó varias semanas en prisión, ha cambiado de abogado (le defiende el letrado Pau Mas) y parece ser que ha llegado a una especie de acuerdo con la fiscalía Anticorrupción a cambio de su colaboración.

El primer desencuentro entre Amengual y su antiguo jefe, Gálvez, se escenificó ayer ante el juez Miguel Florit, que investiga el escándalo que salpica a la empresa pública. De hecho, el ex director general, defendido por Bartomeu Vidal, se negó a contestar a las preguntas que le formuló el letrado que representa a Amengual.

Aunque ya se sabía, Amengual confirmó ayer que el consorcio no abrió ningún expediente para justificar el gasto de los 120.000 euros. Recordó también que una vez que llegaron las facturas al consorcio, volvió a hablar con Gálvez y éste le reiteró que le llegaría la transferencia para pagarlas. No hubo órdenes por escrito, pero Amengual recordaba estas facturas porque se trataba de proveedores con los que nunca había trabajado.

La declaración de Amengual coincide con las manifestaciones que realizó Juan Francisco Gosálbez, el ex jefe de servicios, que fue quién desveló la existencia de esta serie de facturas que se abonaron por unos viajes que no se disfrutaron. Gosálbez implicó directamente a Amengual y a Gálvez. Tras esta declaración el juez abrió una pieza secreta y ordenó que se rastrearan estos pagos. Interpol intenta aclarar cuál fue el destino que se dio finalmente a este dinero.