El Consell de Mallorca ha aprobado hoy, con la abstención del PP, el texto del convenio de carreteras entre el Consell y el Ministerio de Fomento por el cual el Gobierno invertirá 422 millones en la isla hasta 2017, con lo que las primeras obras empezarán "de inmediato" este año.
Así lo ha afirmado durante el pleno celebrado hoy el conseller insular de Carreteras, Antoni Pascual, quien se ha felicitado por la autorización que dio el pasado viernes el Consejo de Ministros al Ministerio de Fomento para gastar esta cantidad en los próximos años.
Según ha dicho Pascual, la anualidad de 2009, de 51,7 millones de euros, permitirá realizar "de inmediato" obras como el tercer carril de la Vía de Cintura, la variante de Son Servera y los accesos al Molinar.
El conseller ha añadido que con el convenio de colaboración en materia de carreteras entre los consells y el Ministerio, que aún debe ratificar Fomento, la realización de las obras será "mucho más ágil".
Serán los propios consells insulares (también se firmarán sendos convenios con los de Menorca, Ibiza y Formentera) los que redactarán y aprobarán los proyectos, sin necesidad de que éstos pasen por una comisión mixta con Fomento.
"A partir de ahora nos pondremos a trabajar en el Consell", ha dicho el conseller, quien ha asegurado que si no se gasta este año toda la primera anualidad, se guardará el dinero para el siguiente.
El conseller de Unió Mallorquina (UM) Miquel Àngel Flaquer ha advertido de que a partir de ahora el Consell tendrá que gestionar mucho más dinero, por lo que ha pedido a la institución que se "adapte a las necesidades".
Por su parte, la consellera del PP Mabel Cabrer ha lamentado que no se haya conseguido antes un acuerdo con Fomento ya que las obras llegan "con nueve meses de retraso".
También ha recordado que aún no está firmado el convenio, sino solo autorizado el gasto para la rúbrica del mismo, y ha opinado que tendrá que ser de nuevo el Consejo de Ministros quien lo apruebe, a lo que Pascual ha respondido que no es así, ya que el Gobierno ha delegado en la ministra de Fomento, Magdalena Álvarez, su visto bueno.
Cabrer ha añadido que el convenio es "gafe", porque llega en una mala situación para el Consell, dado que, a su juicio, el Departamento de Carreteras está "en entredicho" por la imputación de algunos de sus miembros en casos de corrupción, y porque la presidenta de la institución, Francina Armengol, adolece de una "falta de credibilidad".
La consellera popular también ha criticado las desavenencias de los partidos del gobierno en cuanto al Plan Director de Carreteras de Mallorca, en fase de alegaciones, y Pascual se ha mostrado "convencido" de que habrá el consenso para aprobarlo y llevar a cabo obras tan importantes como los accesos a Palma.
Durante el pleno, el PP ha preguntado al equipo de gobierno acerca del aumento de los altos cargos en la institución y los populares han defendido que hay veinte más esta legislatura que la pasada, lo que supone un sobrecoste de un millón de euros.
El vicepresidente del Consell y responsable de Hacienda, Antoni Alemany, ha respondido que es el Govern quien decide en estos casos, que no se ha apreciado el aumento en los presupuestos y, en cuanto a los cargos que hay, ha dicho que se velará por que trabajen.
En otro orden de cosas, el Consell ha dado luz verde al aumento de un 1 por ciento de las tarifas del túnel de Sòller, punto en el que se ha abstenido el PP al considerar que el Consell debería recuperar su concesión, prorrogada hace unos meses hasta 2022.
El conseller Pascual ha respondido que a "todos los grupos" les gustaría recuperarla, pero que no se dispone del dinero para hacerlo, y ha destacado que el aumento en la tarifa es de solo cinco céntimos.
