Los ciudadanos de las islas son de los que más confiesan que "de manera frecuente compra agua embotellada", una actitud que destaca especialmente en las "zonas costeras", como también son las Islas Canarias y la Comunidad Valenciana, según se desprende de un estudio realizado por Ciao para la empresa Philips.

Más de la mitad de los españoles reconoce que no le gusta el sabor que tiene el agua del grifo pero considera que la alternativa, el agua embotellada, es cara, incómoda y contaminante.

Alejandro Cidón, responsable de Philips, confirmó que "un poco más de la mitad de la población se decanta por el agua del grifo, siendo Navarra, Extremadura y Madrid las que presentan índices más altos".

Sin embargo, "los españoles asocian inconvenientes al agua embotellada", entre los que destacan "el gasto" que supone su compra, "la preocupación por el medio ambiente" al ser envases de plástico y "la incomodidad" de transportar las botellas de agua desde la tienda hasta el domicilio.

Por todo ello, desde Philips propusieron el uso de purificadores de agua, cuya "instalación es muy sencilla" y "proporcionan agua pura del grifo sin olores ni sabores".