Tres de cada cuatro agentes de refuerzo de la Policía Nacional y Guardia Civil llegados a Balears con motivo de la Operación Verano son en realidad alumnos en prácticas de sus respectivas academias. Esta situación, confirmada por la Delegación del Gobierno, ha sido duramente criticada por los sindicatos policiales, desde los que se afirma que el nivel de seguridad ciudadana que existe en las islas durante esta temporada alta es inferior al que se daba en invierno.

Desde la Delegación del Gobierno se pone de relieve que este verano han llegado a las islas para reforzar la seguridad 213 policías nacionales y 286 guardias civiles, lo que supone 499 agentes más. Un aspecto a tener en cuenta es que estas cifras no incluyen el dispositivo que se despliega en torno a la Familia Real. Sin embargo, no se oculta que 190 de estos policías y 180 guardias civiles tienen todavía la categoría de alumnos en prácticas, lo que implica que no disponen de ninguna capacidad para actuar en solitario y están obligados a patrullar en compañía de un agente experimentado.

Desde el departamento de Ramon Socías se recuerda que en todos los dispositivos de verano de pasados ejercicios una buena parte de los refuerzos que han llegado han sido personal en prácticas. Así, durante el pasado verano 230 de los 310 agentes destinados al archipiélago también eran alumnos de academia.

En opinión de los sindicatos policiales, resulta "vergonzoso" que el ministerio del Interior aporte unas cifras que en su opinión "están descaradamente manipuladas", ya que "los alumnos en prácticas son sólo eso, y no tienen todavía la categoría de policías nacionales o de guardias civiles".

Según este criterio, en realidad las islas se han visto reforzadas con 23 policías nacionales (cinco para los equipos de subsuelo, siete para el trabajo con perros y 11 para desactivación de explosivos) y 106 guardias civiles.

Traslados y vacaciones

El problema radica en que durante el reciente concurso de traslados, 124 agentes de la Policía Nacional optaron por marcharse a otras comunidades autónomas, mientras que sólo siete decidieron venir al archipiélago. Además, los sindicatos estiman que durante este mes puede haber en Balears unos 300 policías de vacaciones.

Por todo ello, se destaca que la seguridad ciudadana durante el verano en las islas está mucho más debilitada que en los meses de invierno, y ello a pesar de tratarse de la época del año con una mayor población y, consecuentemente, un mayor número de delitos.

Desde la Delegación del Gobierno se rechaza esta interpretación y se defiende la efectividad de los alumnos en prácticas. Además, se achacan las críticas sindicales a las reivindicaciones salariales que existen en este momento y que han llevado a la convocatoria de una huelga de celo.