Las gasolineras recuperaron ayer la normalidad, con concentraciones de vehículos por encima de lo normal que sólo tuvieron un carácter excepcional, según los datos facilitados por el presidente de la asociación balear que agrupa a estas empresas, Jesús Salas.

El presidente de la patronal de estaciones de servicio señaló que durante los últimos días la demanda de carburantes ha llegado a duplicar los niveles habituales, por lo que la previsión para las próximas jornadas es que las ventas de combustibles desciendan, al circular la mayoría de los coches con los depósitos llenos.

Jesús Salas añadió que la fuerte subida de precios de las gasolinas podría retrasarse hasta finales de esta semana, dado que existen presiones para que este nuevo encarecimiento no coincida con el actual conflicto laboral.

Otros sectores

Por otro lado, los transportistas isleños siguen sin sumarse a los paros que se están registrando en la península, y se encuentran a la espera de los resultados de la negociación que se está manteniendo con el ministerio de Fomento. Eso implica que el abastecimiento de carburantes sigue asegurado en el archipiélago.

La patronal Asaja está planteando, por su parte, la posibilidad de convocar movilizaciones por la situación de agricultores y ganaderos, provocada tanto por el encarecimiento del gasóleo como por el alza de los precios de los piensos y de los alimentos para el ganado.