Jaime Montis pertenece, según destaca la web de su bufete, a "una familia de ilustres juristas". Colegiado desde 1970, en 1984 fundó, junto a su hermano Manuel, Montis Abogados, un despacho de asistencia letrada especializado inicialmente en las ramas civil, mercantil y penal del Derecho. Con el tiempo, Montis y su equipo fueron ampliando su actividad a la asesoría fiscal y laboral y se hicieron un sitio relevante en el mercado jurídico de la Mallorca, interviniendo en diferentes asuntos mercantiles.
En la actualidad, su bufete ocupa una casa señorial en la calle Sant Jaume de Palma y ofrece "asesoramiento económico y contable" a clientes nacionales y extranjeros a los que promete "un trato exquisito personalizado".
Su conocimiento de los asuntos empresariales se ha forjado tanto en las tareas como abogado como en su propia actividad personal en el mundo de los negocios. Esta última faceta es la que le ha puesto en el ojo del huracán por sus intereses en Son Oms, un conjunto de fincas agrícolas pegadas al aeropuerto cuya transformación en polígono industrial le reportó importantes beneficios. Los fiscales quieren saber ahora cuál fue su papel real en un asunto que creen muy sospechoso.
ario de la junta de compensación que puso en marcha el polígono, sufrió ayer un registro
