El PP mantiene una postura "radical y revolucionaria" en la defensa del territorio gracias a que el Ejecutivo autonómico está impulsando leyes para protegerlo, algo que "no sucedió en la pasada legislatura, ni durante todo el tiempo en que los 'populares' han gobernado este país".

Así lo consideró hoy en el Pleno del Parlament el presidente del Govern, Francesc Antich, al ser preguntado por la portavoz del PP, Rosa Estarás, quien le ofreció su máximo apoyo para que el Govern pueda incorporar al Decreto Ley de medidas cautelares la protección total de Cala Blanca y Cala Marçal, así como la prohibición de construir un hotel de 450 plazas junto al campo de golf de Es Pujols, en Santanyí.

Estarás insistió en que el Govern debe incorporar en forma de enmiendas al Decreto Ley la protección de estas tres zonas y recordó que el Ayuntamiento de Andratx y el Consell de Mallorca aprobaron por unanimidad la protección de Cala Blanca, lo mismo que sucedió en el Consistorio de Felanitx en relación a Cala Marçal, donde todos los grupos se opusieron a la construcción de 150 adosados.

Asimismo, resaltó que el Ayuntamiento de Santanyí también aprobó por unanimidad una iniciativa mediante la cual, se solicitó al Consell de Mallorca que impidiera la construcción de un hotel de cinco estrellas en el campo de golf de Es Pujol.

Por este motivo, la portavoz 'popular' preguntó a Antich si el hecho de que estas tres zonas no estén incluidas en el Decreto Ley responde a "olvidos o amnesias selectivas". De esta forma, le propuso que proteja Cala Blanca, Cala Marçal y Es Pujol con la "misma cautela" con la que preservó Ses Fontanelles, Ses Feixes o Son Real.

PROTECCIÓN CON "NOMBRE Y APELLIDOS"

Por su parte, Estarás criticó que también que el PSIB, UM y el Bloc "no se ponen de acuerdo" en aprobar el Proyecto de Ley de medidas urgentes y, en esta línea, dijo que, al final, su partido llegará a la conclusión de que esta protección del territorio que pretende hacer el Ejecutivo autonómico tiene "nombres y apellidos y no responde al interés general".

Para la dirigente 'popular', a Antich "se le ha ido de las manos dar cobertura a aquellos que piensan que la política puede llegar a ser una cuestión de mejora exclusivamente personal" y, por otra parte, reiteró el apoyo de su formación al presidente del Ejecutivo para poder proteger aquellas áreas que "sus socios de Gobierno no le han dado el permiso de preservar".

"Está en juego la dignidad de la institución del Govern, porque un presidente no necesita el permiso de algunos de sus socios para proteger el territorio, sino que un verdadero presidente lo hace respondiendo al interés general", concluyó Estarás.

Por su parte, Antich remarcó que es "muy difícil" que pueda recibir lecciones del partido de la oposición, después de que la legislatura pasada fuera "tan accidentada en materia de ordenación del territorio". "Mejor no contestaré las lecciones de ética, porque seguramente deberíamos entrar en un debate que no nos conviene a nadie", recalcó.

No obstante, reconoció estar "satisfecho y contento" de que los 'populares' hayan colocado unos carteles en sus escaños en los que exigen la protección de Cala Blanca y Cala Marçal y rechazan la oferta complementaria en Es Pujol. Para el presidente del Ejecutivo, este hecho pone de manifiesto que "progresamos adecuadamente", aunque precisó que si el PP defiende la protección del territorio es gracias a un Govern que se está "preocupando" por esta cuestión.

"El territorio sólo se protege cuando hay pactos de fuerzas de izquierda, porque cuando gobierna la derecha no hay protección", sentenció el presidente del Ejecutivo.