Así, desde esta mañana la playa quedó abierta al público con bandera verde, tras confirmarse que los resultados de los análisis del agua son positivos y por tanto no entraña peligro alguno para los bañistas. La playa se cerró el martes con bandera roja a la espera de aclarar las circunstancias que habrían provocado la contaminación del agua.

Según informaron fuentes de Salvamento Marítimo, tras tener noticia del seceso el martes, se dio aviso al servicio de limpieza y calidad de las aguas, al Seprona y a Policía Local de Santanyí, que procedieron al cierre de la playa.