El 20% de las personas mayores de 65 años de Balears corren el riesgo de sufrir infartos cerebrales y de miocardio, según afirmó ayer el jefe del servicio de angiología y cirugía vascular del Hospital Son Dureta, Pascual Lozano, quien recordó que factores de riesgo como el tabaco, la diabetes, la hipertensión y el colesterol, favorecen la aparición la enfermedad arterial periférica.

Esta patología, causada por la obstrucción del flujo sanguíneo arterial debido a una acumulación de grasas en las paredes de las arterias que trasportan la sangre hacia la piernas, provoca dolores en las extremidades inferiores. En este sentido, los afectados por esta enfermedad cardiovascular sufren al subir escaleras o pendientes y, a medida que las lesiones progresan, algunos pacientes pueden experimentar dolor en reposo e incluso úlceras y gangrena.

La aparición de esta patología es más común entre personas mayores de 50 años. El doctor Lozano, por su parte, insistió en la necesidad de una detección precoz para aumentar la calidad de vida del paciente ya que, de no ser así, los enfermos tienen muchas posibilidades de sufrir una amputación de las extremidades, un infarto de miocardio o un ictus.

El hospital Son Dureta ha instalado una carpa en la plaza Mayor de Palma donde los ciudadanos podrán someterse a una sencilla prueba de gran utilidad (índice tobillo brazo) para diagnosticar esta patología hasta el jueves. Quienes presenten un índice inferior al 0,9 deberán someterse a tratamiento y adoptar hábitos de vida saludables.