En declaraciones a Onda Cero recogidas por EFE, Rajoy afirmó que en el próximo congreso del PP se incorporarán nuevas personas para presentar a los españoles un partido "moderado, sensato, y que trabaje por la recuperación del sentido común".

Rajoy aseguró además que "nadie" dentro del PP "ha discutido" su liderazgo y se mostró "encantado" de que "todo el mundo" quiera acompañarle en las listas para las elecciones generales, porque "revela la confianza y el apoyo" que sienten hacia él sus compañeros.

"Estoy encantado de que todo el mundo quiera venir conmigo en las listas de las elecciones generales. Estaría más preocupado si no quisiera venir nadie, pero como todos quieren, pues mire usted, ellos encantados, yo encantado, y todo el mundo encantado. Nunca me he visto en una situación igual", agregó.

El líder del PP respondió así al ser preguntado por si considera que la "batalla" entre el alcalde de Madrid, Alberto Ruiz Gallardón, y la presidenta de la Comunidad, Esperanza Aguirre, pone en duda su continuidad al frente del partido en el caso de que pierda las próximas elecciones generales.

Dijo que en las últimas semanas ha "detectado un aumento en el número de amigos" y, aunque admitió que "siempre es mejor tener amigos que enemigos", recalcó a continuación que lo que más le importa es "la defensa de los intereses generales de todos los españoles", y lo que le "digan los militantes" de su partido.

En el caso de que los que se incorporen a las listas sean alcaldes, Rajoy admitió que "son compatibles", aunque añadió que en su partido son "partidarios" de que "se dediquen a una sola cosa".

En cualquier caso, Rajoy insistió en que no hablará de este asunto hasta que se convoquen las elecciones y aseguró que intentará que las listas de su partido "sean lo mejor".

El presidente del PP se refirió asimismo a los resultados de las elecciones autonómicas y municipales del 27 de mayo e insistió en que, en aquellos lugares en los que ningún partido haya obtenido la mayoría absoluta, debería gobernar la lista más votada.

Se mostró partidario de reformar la ley electoral con este fin, y consideró que ha llegado "el momento" de hacer "algún tipo de corrección" y "buscar una fórmula que haga que la voluntad de los electores sea más respetada que lo que está siendo en este momento".

Rajoy se refirió en concreto a Navarra, Cantabria y Baleares y reiteró que su posición "es que se llegue a un acuerdo de partidos".

"Si eso no es posible, veremos qué ocurre", añadió Rajoy quien aseguró que los pactos postelectorales "están abiertos para construir gobiernos con programas conocidos y para un periodo de cuatro años".