"UM no pide nada, ni presidencias ni alcaldía, no pedimos ningún cargo. Queremos hablar de proyecto de país". Con estas palabras la líder de UM, Maria Antònia Munar, anunciaba ayer la decisión de la Ejecutiva de su partido para afrontar las negociaciones con el PP, por un lado, y con el PSOE para reeditar el pacto de progreso. Tras insistir en que UM no negociaría en base a cargos, Munar expuso sus condiciones para alcanzar un acuerdo, muchas de ellas leoninas o difíciles de garantizar para el PP.

Así, por ejemplo, puso sobre la mesa cuestiones como una "fachada marítima" para Palma que sea "un parque", el catalán como "lengua vehicular en los medios de comunicación públicos", es decir, en IB3, o "un pacto por la lengua y la identidad", iniciativas que al PSOE no le supone ninguna cesión, al contrario que al PP. A ellas unió el desarrollo del nuevo Estatut d´Autònomia, con garantías de una "financiación" autonómica adecuada, "que sea posible un Régimen Especial" y la participación del Govern y los consells insulars en la gestión de puertos y aeropuertos.

La garantía de que llegarán las inversiones estatales, cuya exigencia por parte de UM ya adelantó Diario de Mallorca, dependen del Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero. En este sentido, Munar matizó que sus reivindicaciones de carácter estatal pueden asumirlas tanto el PSOE como el PP, ya que dependen de la "voluntad política" y no de quién ocupe ahora el Gobierno central. Así, consideró que aunque en estos momentos es el PSOE el que mejor puede garantizarlas "porque gobierna en Madrid", en "pocos meses habrá elecciones generales y no se sabe" quién ganará.

Sostuvo que UM está dispuesta a "hablar con todos", si bien su partido no dará el primer paso para empezar a negociar ya que "la iniciativa" corresponde a los que "quieren formar gobiernos" y UM no aspira "a presidir nada". Añadió que su partido no descartaba aceptar la propuesta del PSOE de formar gobiernos en el Ejecutivo balear, el Consell de Mallorca y el Ayuntamiento de Palma en los que se integraran UM y el Bloc, aunque también aceptaría dar "apoyo externo" .

"No hay condiciones previas", insistió en un mensaje dirigido tanto al PSOE como al PP. "Ponemos el contador a cero y queremos cerrar heridas tras una dura campaña llena de agresiones que me gustaría que no se repitiera", afirmó en referencia al PP.

El candidato a la alcaldía de Palma, Miquel Nadal, quien había manifestado que las únicas opciones en Cort eran que Catalina Cirer (PP) gobernara en minoría o que él fuera el alcalde, rebajó ayer su discurso. "Soy un hombre de partido y ya veremos lo que pasa, pero no hay condiciones previas", dijo Nadal respaldando la decisión de UM de no negociar en base a cargos.

Munar dejó claro que a la hora de decidir su partido tendrá "todo en cuenta", no sólo la aceptación de sus condiciones sino también el que el PSOE ocupa el Gobierno central o que los otros consells -Menorca, Eivissa y la futura institución insular de Formentera- tampoco están en manos de los populares.

Precisó que las negociaciones se abordarán de forma conjunta para el Govern, el Consell y Cort e incluso, de manera lateral, de "14 ayuntamientos pendientes de pactos" ya que aunque UM da "libertad municipal" para decidir, en su mayoría "piden opinión porque en los ayuntamientos influye el color político que puede haber" en el Govern y el Consell. En cuanto a la victoria del popular Carlos Delgado en Calvià afirmó que UM ha hecho un "buen trabajo", pero Delgado ha aumentado votos porque logró gobernar con mayoría gracias "a un tránsfuga de UM que compró"