La Plataforma Salvem Mallorca y el grupo ecologista GOB han convocado una nueva manifestación para denunciar el desarrollo urbanístico "desbocado" de Mallorca. El acto de protesta tendrá lugar el próximo sábado 17 de marzo a las 18,00 horas en la plaza de España. Hace poco más de un año, el 14 de febrero de 2006, miles de personas tomaron Palma con el mismo objetivo y bajo el lema: "Qui estima Mallorca no la destrueix".

En esta ocasión el lema también es contundente: "Prou destrucció, salvem Mallorca".

La Plataforma, integrada por numerosas entidades, y el grupo ecologista presentaron ayer la protesta explicando que no se trata de manifestar su desacuerdo con un proyecto concreto, sino que el objetivo es "protestar contra un modelo de destrucción generalizada que afecta a toda la isla".

Ante esta situación territorial que consideran "grave" y a la vista que la multitudinaria manifestación de hace un año no ha tenido efectos, la Plataforma y el GOB hacen llegar a la ciudadanía tres reflexiones. En primer lugar, reclaman a los gobernantes que no rechacen esta movilización generalizada. "Queremos que tomen nota de que detrás de esta manifestación no está sólo el GOB, hay muchas personas que nunca se habían manifestado, que provienen de todos los ámbitos y que han dicho basta. Es un claro indicador de la situación insostenible a la cual nos vemos abocados", indicaron.

La segunda reflexión que quieren hacer llegar a la sociedad mallorquina es que "sea consciente de la importancia de hacer sentir su voz". Recuerdan la importancia de las diferentes luchas en favor del territorio y apuntan que en los últimos meses "se ha visto caer algunos símbolos de la impunidad y la prepotencia", en clara alusión a los ex alcaldes de Andratx y de Santa Margalida, que durante sus mandatos se han caracterizado por el desarrollismo en sus municipios. La tercera reflexión es que no se trata de un acto electoral y sólo se pretende que se gobierne "con seny".

Consumo nunca visto

En la presentación realizada ayer, los integrantes del GOB y Salvem Mallorca dejaron claro que el desmesurado consumo de territorio que se ha realizado durante la legislatura que está a punto de terminar nunca se había visto hasta el momento en Mallorca. Por ello, en la manifestación quieren pedir a los gobernantes un poco más de "control a la hora de llevar a cabo proyectos que pueden suponer una transformación radical e irreversible del territorio".

Entre los proyectos que denuncias destacan los 14 nuevos campos de golf proyectados; la desprotección de los espacios naturales del Llevant y del Salobrar de Campos; el crecimiento desmesurado de los polígonos industriales; el nacimiento de canteras en la zona del Pla de Mallorca; la ampliación del aeropuerto; el aumento del consumo energético por la proliferación de desaladoras; las nuevas centrales eléctricas y el incremento de los residuos con ampliación incluida de la incineradora.

Asimismo, critican las autopistas, que han "desfigurado" del paisaje rural de Mallorca y Eivissa. Desde la Plataforma y el Gob explican que la construcción de hasta siete nuevas autopistas implica "el consumo brutal del territorio y la apuesta decidida por el transporte privado en detrimento del transporte colectivo, unido a la preparación de todo el interior de Mallorca para un uso urbanístico mucho más intenso".