La vicepresidenta del Govern, Rosa Estarás, afirmó ayer en el pleno del Parlament que, según sus cálculos, el presupuesto de la autonómica IB3 a final de año alcanzará aproximadamente los 46,2 millones de euros. Según concretó, a lo largo del año el ente habrá recibido 9,2 millones de las arcas autonómicas, 28 millones procedentes del endeudamiento, entre "5 ó 6 millones" de publicidad institucional y otros 3 millones de publicidad privada.
Estarás ofreció estos datos en respuesta a una pregunta formulada por el diputado socialista Antoni Diéguez, quien se mostró convencido de que la cifra final ascenderá a "aproximadamente 60 millones de euros". Diéguez afirmó que "ya se han consumido" los 12 millones de ingresos y los 28 millones de endeudamiento inicialmente presupuestados, a lo que habrá que sumar el dinero que el Govern ha destinado a patrocinios, subvenciones y otros contratos. "Si alcanzamos los 60 millones, IB3 habrá costado este año 195.000 euros por día", dijo.
Estarás sostuvo que IB3 es una de las televisiones publicas de España con menos coste. "La televisión es un servicio público y no puede medirse sólo en términos de rentabilidad económica", añadió.
Las preguntas del PSIB sobre IB3 provocaron un tenso enfrentamiento entre el grupo socialista y la vicepresidenta. Pilar Costa, del PSIB, preguntó por la presencia de Estarás y las conselleres Mabel Cabrer y Aina Castillo en el programa infantil de la Fundación Teresa Rabal para entregar premios a los niños, acusando al Govern de utilizar un programa de estas características a su favor. "Estamos orgullosos de participar un domingo, a las 6,30 de la tarde, en este programa y construir un mundo mejor", dijo Estarás.
Diéguez aprovechó este asunto para acusar al Govern de "utilizar a los niños como escudos humanos para su figurera". Afirmó que IB3 "se está convirtiendo en frikilandia", con "contratos a Pocholo o Matamoros", y que Estarás contestaba a estas cuestiones de manera "resentida" y con "nerviosismo". Estarás, tras negar esos contratos, acusó a Diéguez de buscar el "morbo" en sus preguntas y sufrir "ataques de protagonismo, parecidos a los que le da a Laporta en los últimos días", que le llevan a practicar "una política esperpéntica".
