Una encuesta entre los alumnos de ESO de las islas revela que casi el 36 por ciento de estos adolescentes se ha sentido, al menos una vez, acosado o maltratado por sus compañeros, fenómeno conocido como bullying. De los diferentes tipos de violencia, la física es la menos habitual. José Ignacio Pérez Argüelles, presidente de la Asociación Familiar de Balears, responsable de la encuesta, asegura que no hay que crear alarma sobre estos datos.

La encuesta cuenta con las respuestas de 7.939 estudiantes de ESO, de entre 12 y 18 años de una cincuentena de centros escolares y ha contado con una subvención de 18.000 euros de Sa Nostra. En ella se explica que ese 35,9% de jóvenes acosados o maltratados, es la suma de un 27,4% de adolescentes que responde que lo ha sido sólo una vez, y del 8,5% que afirma que le ha sucedido en varias ocasiones o constantemente, casos que son considerados como los más graves.

Insultos y motes

La agresión más habitual es la verbal, con insultos o motes, mientras que la física es la menos común, con un 14% de adolescentes que responde "alguna vez" y un 3% "varias veces o constantemente". Estos últimos datos dejan a Balears en mejor posición que el conjunto del Estado, apuntó Pérez Argüelles, por lo que añadió que "no hay que alarmar". Sobre las agresiones físicas, el estudio concluye que las víctimas suelen ser chicos y en las edades más tempranas de la adolescencia, los 12 años.

Varios estudios han incidido en la gravedad de la violencia entre escolares por ser un problema que es difícil de detectar y esta encuesta lo ratifica, ya que un 34,1% de las víctimas asegura que no lo comenta con nadie, mientras que otro 30% se lo cuenta a sus amigos. El resto lo habla con sus padres y hermanos, con algún profesor o con otras personas. El presidente de la Asociación Familiar de Balears considera una buena idea la reciente creación del observatorio para la violencia escolar, pero reclamó mayor agilidad en sus actuaciones.

Fracaso y absentismo

Al hablar de fracaso escolar, la encuesta incide en que sólo un 21,5% de los chicos y chicas es consciente de que saca malas notas, cuando la tasa de abandono sin finalizar la ESO es del 38,6%. La diferencia entre los dos porcentajes se interpreta como el grupo de jóvenes que pese a no sacar buenas notas no considera que haya fracasado y "no percibe la gravedad de su situación académica abocada estadísticamente a no acabar la ESO", se afirma en el estudio.

El absentismo escolar es otras de las cuestiones que abarca la encuesta. El 25,4% de estos alumnos falta a clase esporádicamente de forma injustificada y un 1,5% se ausenta varias veces por semana. Ir a pasear, hablar con los amigos, dormir o quedarse en casa, para jugar al ordenador o ver la tele, son las principales alternativas a ir a clase.

Sobre su futuro tras la ESO, uno de cada cinco jóvenes contesta que no sabe qué hará y un 6% desconoce si acabará esta etapa educativa, porcentaje similar al de quienes quieren trabajar cuanto antes. Un 43% afirma que estudiará Bachillerato y después irá a la universidad.