El 22% de los hoteles de balears, es decir, casi uno de cada cuatro, tiene ya alrededor de cuarenta años de vida y cuenta con instalaciones obsoletas, según recoge un estudio del Centre de Recerca Econòmica UIB-Sa Nostra, lo que ha llevado a la Agrupación de Cadenas Hoteleras a reclamar que este tipo de establecimientos puedan ser reconvertidos en viviendas con el fin de reducir el perjudicial exceso de plazas en el mercado.

A la vista de los resultados que ha arrojado el estudio sobre la oferta hotelera balear presentado ayer en Palma, el Centre de Recerca Econòmica (CRE) propone a los empresarios modernizar la planta e implantar servicios especializados que aporten un valor añadido que permita mantener a los clientes que se ha logrado fidelizar a lo largo de los años.

Sin embargo, Francisco Miralles, presidente de la Agrupación de Cadenas Hoteleras, explicó que uno de los mayores inconvenientes para que ello tenga lugar es el paulatino descenso de la rentabilidad empresarial, derivada del mantenimiento de precios durante los últimos ejercicios y el aumento de los costes operativos.

Reconvertir y eliminar plazas

Esto dificulta enormemente la reinversión y, por tanto, Miralles apuntó que la solución pasa por la reconversión de hoteles en viviendas, lo que permitiría eliminar oferta sobrante y propiciaría un aumento de precios.

Por otro lado, pese a que más del 20% de los hoteles tiene instalaciones obsoletas, desde la patronal recalcaron que durante los últimos años las situación ha mejorado mucho gracias a que se ha llevado a cabo un importante proceso de renovación.

De hecho, el CRE señala en su informe que, de promedio, los hoteles de Balears (un total de 1.330 con 312.802 plazas) han realizado su última reforma hace cuatro años. Como dato a tener en cuenta, los empresarios indicaron que una modificación en profundidad resiste entre seis y siete años, tras los cuales es necesario realizar una nueva gran inversión para mantener el atractivo del hotel.

Tres y cuatro estrellas

La patronal señaló que la aspiración de todo empresario es incrementar la categoría de sus establecimientos máxime cuando hoy día se admite que se está registrando más demanda de hoteles de cuatro estrellas que de tres.

Aún así, el CRE señala que el establecimiento representativo de la oferta hotelera de las islas continúa siendo el de tres estrellas, que aglutina el 54% de la oferta de plazas y el 37% de los hoteles.

Por otro lado, recoge Efe, el conseller de Turismo, Joan Flaquer, señaló que el proceso de modernización de la planta hotelera balear "está abierto desde hace años" y destacó que es "imparable y no acaba nunca".

Asimismo indicó que el actual no es un momento en que la mejora de las instalaciones sea una necesidad especialmente acuciante e hizo hincapié en que "los esfuerzos de modernización y diversificación deben ser constantes".

Respecto a la temporada, el conseller dijo que está "a punto" de alcanzar las buenas cifras de 1999 "en todos los indicadores", ocupación, ingresos y creación de empleo.