Una asociación de funcionarios de Justicia reclamó ayer la funcionarización de los 300 interinos que vienen trabajando, de manera más o menos continua, en Balears para dicha administración. Los promotores de la iniciativa postulan, entre otras alternativas, la convocatoria de oposiciones reservadas para este tipo de personal.

El personal interino de la Administración de Justicia desarrolla idénticos cometidos a sus compañeros de carrera, pero no recibe el mismo salario y sus destinos son eventuales. Los interinos cubren las bajas por enfermedad o las excedencias por actividades sindicales de los funcionarios.

También ocupan puestos en tanto éstos no se cubren oficialmente o por otros motivos muy diversos.

Muchos de los interinos llevan años trabajando en Justicia y su continuo peregrinar de juzgado en juzgado y tribunal en tribunal los ha convertido en funcionarios avezados y hábiles en todos los órdenes jurisdiccionales.

Proceso de transferencias

La reivindicación de este colectivo de eventuales, algunos de los cuales se han unido en la asociación de interinos de la administración de justicia de Balears, se ha intensificado coincidiendo con el proceso de negociación para que el Govern asuma las competencias en materia de gestión de medios y personal de Justicia.

Otro cambio importante que está en ciernes es la reforma de la llamada oficina judicial, o estructura de despliegue del personal al servicio de la Justicia.

La asociación citada propone que el proceso de funcionarización de los interinos "se haga desde dentro y no desde fuera".

Hasta ahora el único sistema válido para que estos trabajadores consoliden su puesto es aprobar una oposición, en la que su experiencia laboral no significa ningún tipo de ventaja o situación especial.

Continuidad laboral

La asociación propugna la consolidación del empleo para los interinos "por concurso de méritos y con base en la fecha en qué tomaron posesión por primera vez".

Una de las desventajas de este tipo de "funcionarios" es que sus períodos de trabajo, salvo algunas excepciones, son intermitentes. Cubren un puesto unos meses y cesan. Luego no tienen preferencia para llenar otra vacante y se van a los últimos lugares de la bolsa de interinos. La solución propuesta, para dar estabilidad a estas personas, es que la preferencia a la hora de trabajar sea por orden de antigüedad. Sobre las oposiciones restringidas se plantean plazas reservadas para los interinos y que la antigüedad en el trabajo les dé puntos. La asociación lamenta que la experiencia de este personal no valga nada ni dentro ni fuera de la Administración.