La Asociación de Directores de Animación de Mallorca (ADAM) mantuvo ayer una comida de trabajo donde se expusieron los cambios suscitados con el auge del ´todo incluido´. Esta modalidad hotelera ha repercutido en la labor de los animadores, tal como ha podido saber este diario: las prestaciones se reducen al entretenimiento diurno y a los niños. Cada vez cobran más importancia las actividades deportivas, como los partidos de voleibol. Por la noche, los espectáculos recaen en profesionales -cantantes o ilusionistas- en detrimento de los animadores, como ocurría hasta ahora. De esta manera, las galas se reducen a poco más de sesenta minutos para que los clientes no pasen mucho tiempo en la sala y consuman cantidades ingentes de bebidas gratis gracias al paquete de ´todo incluido´. En otro orden de cosas, el portavoz de ADAM, Jean Paul Simon, lamenta la falta de profesionales de la animación y la ausencia de formación reglada.