EU-EV denunció ayer que el Govern ha suprimido una partida de unos 300.500 euros anuales destinada a ayudar a las familias en riesgo de exclusión social por ser susceptibles de un posible desahucio, como parte de su política de "retroceso y supresión de las prestaciones sociales".

El portavoz, Miquel Rosselló, alertó sobre la retirada de estas subvenciones que se establecieron en la legislatura del Pacto para mejorar la situación de estas familias.

Para percibir las ayudas, que nunca superaban los 2.000 euros por núcleo familiar, éste debía percibir una renta inferior al salario mínimo interprofesional y correr el riesgo de desahucio por no disponer de medios para pagar la vivienda, agregó.

Las familias, añadió, podían acogerse a esta ayuda para afrontar el pago de su vivienda, lo cual evitaba que se quedasen en la calle y que sus hijos tuvieran que acogerse a la tutela de los servicios sociales del Govern.