El Fons Mallorquí de Solidaritat tiene previsto destinar a lo largo de este año 2,2 millones de euros a la cooperación con países subdesarrollados, tal y como dio a conocer la propia institución. La mayoría de las iniciativas, que abarcan numerosos campos, desde la educación hasta la creación de infraestructuras, se desarrollarán en América Central.

Del total de presupuesto, 1,5 millones de euros serán dedicados a la financiación de proyectos. El resto se utilizará para responder ante situaciones de emergencia, poner en práctica tareas de sensibilización y difusión y a sufragar trabajos de gestión. Del capital que se dirige a proyectos, la mayor parte, 867.929 euros, irá a parar a iniciativas localizadas en América Central, Méjico y Caribe. Le sigue en importancia el continente africano, donde se financiarán actividades por valor de 313.688 euros. En Sudamérica se concederán ayudas por 287.176 euros; en Europa, por 75.000 y en Asia, por 93.000 euros.

En América Central, los proyectos más ambiciosos, dotados con 69.803, 63.033 y 60.000 euros respectivamente se centran en El Salvador y están dirigidos al refuerzo de la economía familiar y de la organización comunal en La Libertad; la educación ambiental, la recolección y el reciclaje de resíduos en San Salvador (a través de Deixalles) y a la educación ciudadana en la separación de residuos sólidos, en ese mismo lugar. Sus beneficiarios son campesinos y población rural, jóvenes y población en general.

En África, la mayor aportación,

de 70.000 euros está dirigida al programa de vacunación infantil y juvenil y de atención al niño que la Associació d'Amics del Poble Saharià desarrolla en los campamentos de refugiados de Argelia. Le sigue una ayuda de 60.000 euros, para el proyecto de Médicos sin Fronteras diseñado para reducir los efectos de la malaria en Kigoma (Tanzania).

En Sudamérica, el proyecto que recibe más aportación económica es el que Deixalles desarrolla en Venezuela para la inserción sociolaboral de jóvenes y mujeres a partir del aprovechamiento del residuos. A él se dedican 35.170 euros.

El proyecto de la Fundació Vicenç Ferrer para la escolarización de 111 niños discapacitados en Kadari, India, recibe 40.000 euros y es el mayor dotado de Asia. La misma asociación se encargará de una iniciativa destinada a evitar el éxodo rural y lograr la integración social. En este caso, el Fons aporta 35.000 euros a la creación de 37 viviendas para familias marginadas con

En Palestina se dedican 40.000 euros a la salud sexual y reproductiva para las mujeres, un proyecto que desarrolla Acsur y en Bosnia se invierten 35.000 euros en la reconstrucción de la escuela de Voljevica.