Los sectores oficialista y crítico del PSIB-PSOE ultiman la redacción conjunta de las ponencias que se llevarán al congreso de Mallorca este fin de semana. "Hay acuerdo, a falta de cerrar pequeños matices", aseguró Josep Lluís Mádico, uno de los integrantes de la comisión negociadora por parte de los críticos.

En estos momentos, se están perfilando las enmiendas transaccionales que se elevarán al congreso, al que asistirán 200 delegados de los distintos municipios de la isla. Hoy a primera hora está prevista una última reunión para acabar de revisar el redactado. "Esperamos que todo vaya bien", apuntó Mádico.

La ponencia más espinosa a la hora de alcanzar el consenso ha sido la relativa la organización, sobre todo por Palma, dirigida por una gestora desde que se disolviera la Unión de Socialistas de Palma. Finalmente, se ha optado por una adaptación a la ley de ciudades que supondrá la división en seis, siete u ocho agrupaciones, frente a las cuatro actuales. Además, se aboga por la creación de un órgano superior de coordinación que se reunirá al menos dos veces al año para revisar los presupuestos municipales y el estado de la ciudad. El nombre de este órgano está por decidirse.

El congreso verá otras dos ponencias, donde ha sido más fácil el acuerdo. Una analiza las claves de la pérdida del poder y analiza la situación política actual. Otra se centra en propuestas concretas del partido para diferentes campos, como pueden ser la educación o la vivienda, entre otras.

La hora de las listas

Una vez alcanzado el acuerdo en materia de ponencias, los líderes de los sectores oficialista y crítico tratarán de pactar una lista de integración que aglutine todas las sensibilidades. En Mallorca, Francina Armengol encabezará una lista para revalidar su cargo como secretaria general. Está por ver, si los críticos, liderados por Damià Cànoves, acaban presentando lista alternativa como habían anunciado o pactan su integración en la lista de Armengol. Este sector reúne distintas sensibilidades, fundamentalmente concentradas en el área metropolitana de la isla, Palma y Calvià, fundamentalmente, mientras que Armengol concentra sus mayores apoyos en la part forana.

En Menorca, la diputada Carme García Querol puede poner en una difícil lugar a la presidenta del Consell, Joana Barceló, si finalmente presenta una lista alternativa a los oficialistas. Tampoco se descarta el acuerdo. En las pitiusas, Xicu Tarrés, líder de los oficialistas, también trata de apaciguar a los sectores más alejados de las posiciones nacionalistas.