La recientemente creada Cámara de Comercio hispano-rusa está organizando el envío de 150.000 turistas a Balears para la próxima temporada baja, según informó ayer el consejero delegado de la entidad, Ignacio Knorr.

Se trata de trabajadores de las empresas públicas de Rusia que incentivan a sus empleados mediante el programa Educación y descanso, tal como se hacía durante la era comunista. Knorr dijo que esta costumbre, muy arraigada en empresas de 30.000 trabajadores o mayores, aun pervive y ahora se estudia enviar a estos trabajadores al extranjero.

Knorr dijo que interesa Balears como destino de temporada baja y la cifra de 150.000 personas corresponde al primer año de operación, pero posteriormente podría ampliarse. Dicha cantidad equivale a la totalidad del turismo del Imserso en las islas, que a su vez representa el 75 por ciento del total que se contabiliza en invierno.

Balears sería una alternativa a Turquía, país que era inicialmente el indicado para esta operación, pero el peligro constante de la comisión de actos terroristas le invalida como destino turístico.

Aún no se han iniciado conversaciones con los hoteleros para la petición de cupos y Knorr dijo que si no se cuenta con camas suficientes para estos visitantes, "buscaremos plazas en otras zonas, como la Costa del Sol o la Costa Brava".

La Cámara se presentará oficialmente en Balears en la segunda quincena de septiembre y para esa fecha sus directivos tienen previsto hablar con el conseller de Turismo, Joan Flaquer, sobre el tema. "Una inyección de turistas tan importante en temporada baja será determinante para desestacionalizar el turismo, por lo que creemos que el Govern estará interesado".