El secretario general del PSOE balear, Francesc Antich, remitió ayer una carta al president del Govern, Jaume Matas, en la que si bien valora la iniciativa de convocar a los agentes sociales el próximo lunes, le parece una medida "insuficiente" ante la "crisis" económica. Por ello, según explicó, le emplaza a un pacto político con todos los partidos para cambiar un modelo turístico que "presenta síntomas de agotamiento". El diputado y ex conseller de Turismo, Celestí Alomar, agregó que si no se produce este cambio, Balears entrará en "una espiral de menos ingresos y menos calidad".
El portavoz del PSM en el Parlament, Pere Sampol, también se refirió ayer a la situación económica y sostuvo que "nunca había existido un pesimismo tan profundo en la clase empresarial y tal sensación de derrota", que ha llevado a "los hoteleros a caer en la esquizofrenia", planteando posturas "contradictorias". Entre ellas, destacó el que "piden que se limite la construcción de segundas residencias y, por otra parte, piden la conversión de hoteles en edificios de apartamentos".
En lo que se refiere a la reconversión, Alomar consideró que "los cambios de usos de plazas obsoletas de una forma generalizada no es lo más correcto y, aunque se puede dar en algunos casos, no es la solución". Agregó que los socialistas no son "reacios a ayudas fiscales de la administración" para estos cambios, pero sí a que "la sociedad tenga que comprarle las plazas al señor que se va del mercado". Para el PSOE, hay que apostar por el intercambio de plazas entre establecimientos antiguos y nuevos y adaptar los hoteles cambiando las dimensiones.
En su escrito a Matas, Antich resalta como "los tres campos de debate para poner sobre la mesa" la "definición de instrumentos que permitan un redimensionamiento de la oferta de alojamientos turísticos y residenciales y su adaptación a las nuevas demandas", la creación de un sistema de tecnología avanzada para dar respuesta a las demandas del mercado y la "definición de instrumentos adecuados para la diversificación de nuestro producto".
Antich y Alomar criticaron de nuevo la supresión de la ecotasa y la caída en el todo incluido. El retraso en el plan de marcas y el retroceso de la política de desestacionalización fueron algunas de las críticas lanzadas al Govern, si bien lo que consideraron muy grave es "el retroceso en la imagen exterior, cuando se había logrado invertir la imagen de destino masificado". Alomar sostuvo que "ahora la imagen de Balears es de destino baratero, de un país que está en oferta".
Reconversión
Sampol se mostró radicalmente contrario a "la conversión de hoteles en apartamentos", ya que "sólo faltaba que los que hicieron desastres como las torres de Magaluf, los que destruyeron Mallorca, ahora puedan tener expectativas especulativas para dar un pelotazo reconvirtiendo los hoteles". Sostuvo que la situación turística "es peor que nunca" e ironizó sobre las declaraciones de Matas a los tres meses de su Govern cuando dijo que "la sociedad ha recuperado la confianza".
Afirmó que la reconversión de hoteles en apartamentos aumentará las segundas residencias y provocará "una mezcla de usos que conducen a la degradación, como ocurrió en Cala Major", además de suponer el cierre de hoteles y la "destrucción de puestos de trabajo".
