Como no podía ser de otro modo, Miquel Nadal estaba ayer noche eufórico en la cena de Navidad de UM. En su primer discurso tras estrenar el cargo, Nadal se dirigió a las más de mil doscientas personas en es Fogueró y les dijo que aportará "un estilo nuevo" al servicio del partido y del país.

Antes le precedió el nuevo secretario general, Miquel Ferrer. Algo más espontáneo que el flamante presidente, centró su discurso en el nacionalismo y la protección territorial. El también alcalde de Alcúdia dio a conocer a los suyos su ideario político, queriendo transmitir que estaba convencido de lo que decía, y terminó "compartiendo" una "convicción muy personal: Hemos acertado con la persona del presidente, Miquel Nadal tiene toda mi confianza".

A los aplausos de rigor le siguió el susodicho. En una intervención muy medida, con constantes referencias a "Mallorca", Nadal propuso "retornar a los principios y a las convicciones", valores para él "esenciales". Y qué mejor noche que ayer para dar a conocer sus "compromisos". El listado empezó con un enfático "soy nacionalista", y anunció -para los que dudaran de que dicha ideología era exclusiva de Ferrer- que "el eje nacional tiene que predominar sobre cualquier otro". Nadal defenderá un modelo "muy diferente a la españolidad del PP y PSOE de Baleares, partidos de estricta obediencia estatal" (a Pere Rotger y Francina Armengol, presentes en el acto, no debió hacerles mucha gracia). También dijo ser "liberal", en el sentido más amplio del término, y estar "a favor de la globalización", lo que obliga a Mallorca a "no ser una colonia de Madrid o Frankfurt". En medio de ello, anunció que "defenderá" a "todos los militantes de UM que sean perseguidos por motivo de su militancia, en este camino que se ha iniciado de judicializar la vida política".

Un voto es un voto, y por eso Nadal lanzó un guiño a los inmigrantes leyendo un párrafo en castellano, para llegar "a todas las personas moderadas de Mallorca que tengan la ambición y el orgullo de sentirse mallorquines". Ayer abrió "las puertas de UM a todos los que estimen -sic- Mallorca, vengan de donde vengan". Tras las palabras, entregó un ramo a Munar, que fue ovacionada durante varios minutos, y todos a cenar.