
No hay muchos sectores productivos en España que a nivel macro sean tan relevantes y en tantos aspectos como lo es la industria farmacéutica.
En esta situación actual de deflación, de rentas familiares que van socavando la confianza de las bolsas mundiales, de crisis energéticas y de transición hacia renovables que aún están por verse, la I+D científica enfocada a la curación de enfermedades es una realidad de la que poder presumir.
Las crisis estructurales o coyunturales ponen a prueba la solidez de negocios, marcas, esferas enteras de la economía. El éxito de la industria farmacéutica reside en muchos factores. El sentido común nos lleva a pensar que quien mejor sobrevive a estas cuestiones son los sectores más necesarios, los que la sociedad considera primordiales para seguir funcionando. Este grado de necesidad cumplido se ha demostrado con la pandemia cuando la máquina se forzó hasta conseguir el objetivo de tener varias dosis de la vacuna para el 100% de la población en un tiempo récord. Aquel hito ha quedado en la memoria colectiva como un triunfo, pero no es el único. Hay muchas claves que definen el éxito de la industria farmacéutica, sin embargo, estas son las diez más contundentes:
1. La innovación aumenta la esperanza de vida
El aumento de la esperanza de vida ha sido un logro de la investigación en medicamentos. No es casualidad que sólo en la primera década de este siglo se ganaron 1,74 años de vida en los países desarrollados, de los que el 73% se atribuye al efecto positivo de los nuevos medicamentos sobre la salud de la población.
2. La inversión en salud genera crecimiento económico
Un informe elaborado por Analistas Financieros Internaciones (Afi) con el apoyo de la Fundación Farmaindustria, asegura que con un aumento de dos puntos sobre el PIB en la inversión en sanidad la tasa de crecimiento del PIB español entre 2025-2040 sería de 0,25 puntos porcentuales durante cada uno de los años, de forma que en 2040 el PIB sería en torno a un 4% más alto. Además, cada euro invertido en investigación sanitaria (pública o privada) genera 1,6 euros de valor añadido de manera directa, indirecta e inducida, y cada millón de euros invertido en el sector contribuye a generar y mantener más de 15,6 empleos.
3. Ahorros en el sistema sanitario
La inversión de un euro en medicamentos ahorra entre 2 y 7 euros en otras prestaciones sanitarias. Aunque en general los nuevos medicamentos suelen ser más caros que aquéllos a los que sustituyen, su efectividad también suele ser superior. Esto se cumple tanto para los medicamentos tradicionales como para los biotecnológicos. Además, podrían sustituir a procedimientos quirúrgicos más caros y, gracias al mejor estado de salud que permiten a los pacientes, podrían evitar hospitalizaciones y el uso de otros recursos médicos, generando así un potencial ahorro neto de costes al sistema sanitario.
4. Referencia en ensayos clínicos
España es uno de los países del mundo con mejores condiciones para el desarrollo de ensayos clínicos. Estos estudios son una oportunidad para atraer inversión internacional y una oportunidad para los pacientes ya que puede ser la única salida para ciertos pacientes graves. Hoy, el 60% de la inversión en I+D que hacen las compañías farmacéuticas en España corresponde ya a investigación clínica.
5. Líder en inversión I+D
El dato: uno de cada cinco euros que la industria invierte en I+D en España proviene de la industria farmacéutica, lo que convierte a este sector, junto a la automoción, en el líder industrial en este ámbito.
6. Líder en productividad por detrás del petróleo
La productividad de la industria farmacéutica alcanza los 173.000 euros de valor añadido bruto por empleado, más del doble de la media de los sectores industriales. Entre los periodos 2009-2013 y 2014- 2018, la productividad de la industria farmacéutica creció un promedio de 11,7% (pasando de 103,7 a 115,9 mil euros por empleado).
7. Significa el 5,4% de las exportaciones españolas
En los últimos años, las exportaciones de la industria farmacéutica han seguido una tendencia creciente. Así, en 2021 batió de nuevo su récord, con 17.076 millones de euros en ventas al exterior, lo que sitúa al medicamento como el cuarto producto más exportado del país, con el 5,4% del total de exportaciones españolas. Dentro de las exportaciones de productos de alta tecnología, los productos farmacéuticos suponen el 24% del total, lo que convierte a esta industria, junto con la aeroespacial, en el sector más importante en este ámbito.
8. Genera empleo
La industria farmacéutica genera en España más de 210.000 puestos de trabajo directos, indirectos e inducidos. El empleo directo alcanza los 44.068 ocupados, tras registrar un crecimiento medio anual superior al 2% durante el último cuatrienio (2017-2021).
9. Empleo indefinido al 94%
Y además es un empleo estable: un 93,4% de los contratos son indefinidos y sólo el 1,0% del empleo fijo trabaja a tiempo parcial, cuando la media nacional es del 18,1%.
10. Industria de vanguardia en cuanto a igualdad y diversidad
Y es que más del 53% de los trabajaores son mujeres (la media de la industria nacional está en un 26%), un porcentaje que se eleva al 67% en los departamentos de I+D. En concreto, la plantilla de mujeres ha crecido en los últimos 4 años a un ritmo medio anual del 2,8%.