Su último belén, adquirido este mismo año «por su originalidad», se parece a las piezas del popular videojuego Tetris, aunque hay muchas más peculiaridades en la extensa colección de nacimientos de Pilar Vázquez, que supera el millar, procedentes de casi todo el mundo. Tiene uno donde el niño Jesús, la Virgen María y San José se encuentran en el interior de una cáscara de centollo. «Me lo comí en un viaje a Galicia, guardé el caparazón y el belenista Pere Costa se encargó de crearlo», tal como explica. Y otro está en una portería de fútbol que hace de portal y la familia de la Natividad va equipada con los colores del Athletic de Bilbao. Las sorpresas se suceden, como las anécdotas sobre su origen, entre ellas que estuvo a punto de perder un avión en Miami por querer comprar un belén elaborado con mazorcas de maíz. «Los hacían gallegos que emigraron a EEUU y vieron que allí solo había Papás Noel», dice la compatriota residente en la isla, cuyas figuras acapararon este jueves buena parte de la atención en la apertura del Jai de Nadal.
Exposición de belenes en el Jai de Nadal del Centro de Historia y Cultura Militar de Palma
B. Ramon
Su último belén, adquirido este mismo año «por su originalidad», se parece a las piezas del popular videojuego Tetris, aunque hay muchas más peculiaridades en la extensa colección de nacimientos de Pilar Vázquez, que supera el millar, procedentes de casi todo el mundo. Tiene uno donde el niño Jesús, la Virgen María y San José se encuentran en el interior de una cáscara de centollo. «Me lo comí en un viaje a Galicia, guardé el caparazón y el belenista Pere Costa se encargó de crearlo», tal como explica. Y otro está en una portería de fútbol que hace de portal y la familia de la Natividad va equipada con los colores del Athletic de Bilbao. Las sorpresas se suceden, como las anécdotas sobre su origen, entre ellas que estuvo a punto de perder un avión en Miami por querer comprar un belén elaborado con mazorcas de maíz. «Los hacían gallegos que emigraron a EEUU y vieron que allí solo había Papás Noel», dice la compatriota residente en la isla, cuyas figuras acapararon este jueves buena parte de la atención en la apertura del Jai de Nadal.
Exposición de belenes en el Jai de Nadal del Centro de Historia y Cultura Militar de Palma
B. Ramon
Su último belén, adquirido este mismo año «por su originalidad», se parece a las piezas del popular videojuego Tetris, aunque hay muchas más peculiaridades en la extensa colección de nacimientos de Pilar Vázquez, que supera el millar, procedentes de casi todo el mundo. Tiene uno donde el niño Jesús, la Virgen María y San José se encuentran en el interior de una cáscara de centollo. «Me lo comí en un viaje a Galicia, guardé el caparazón y el belenista Pere Costa se encargó de crearlo», tal como explica. Y otro está en una portería de fútbol que hace de portal y la familia de la Natividad va equipada con los colores del Athletic de Bilbao. Las sorpresas se suceden, como las anécdotas sobre su origen, entre ellas que estuvo a punto de perder un avión en Miami por querer comprar un belén elaborado con mazorcas de maíz. «Los hacían gallegos que emigraron a EEUU y vieron que allí solo había Papás Noel», dice la compatriota residente en la isla, cuyas figuras acapararon este jueves buena parte de la atención en la apertura del Jai de Nadal.
Exposición de belenes en el Jai de Nadal del Centro de Historia y Cultura Militar de Palma
B. Ramon
Su último belén, adquirido este mismo año «por su originalidad», se parece a las piezas del popular videojuego Tetris, aunque hay muchas más peculiaridades en la extensa colección de nacimientos de Pilar Vázquez, que supera el millar, procedentes de casi todo el mundo. Tiene uno donde el niño Jesús, la Virgen María y San José se encuentran en el interior de una cáscara de centollo. «Me lo comí en un viaje a Galicia, guardé el caparazón y el belenista Pere Costa se encargó de crearlo», tal como explica. Y otro está en una portería de fútbol que hace de portal y la familia de la Natividad va equipada con los colores del Athletic de Bilbao. Las sorpresas se suceden, como las anécdotas sobre su origen, entre ellas que estuvo a punto de perder un avión en Miami por querer comprar un belén elaborado con mazorcas de maíz. «Los hacían gallegos que emigraron a EEUU y vieron que allí solo había Papás Noel», dice la compatriota residente en la isla, cuyas figuras acapararon este jueves buena parte de la atención en la apertura del Jai de Nadal.
Exposición de belenes en el Jai de Nadal del Centro de Historia y Cultura Militar de Palma
B. Ramon
Su último belén, adquirido este mismo año «por su originalidad», se parece a las piezas del popular videojuego Tetris, aunque hay muchas más peculiaridades en la extensa colección de nacimientos de Pilar Vázquez, que supera el millar, procedentes de casi todo el mundo. Tiene uno donde el niño Jesús, la Virgen María y San José se encuentran en el interior de una cáscara de centollo. «Me lo comí en un viaje a Galicia, guardé el caparazón y el belenista Pere Costa se encargó de crearlo», tal como explica. Y otro está en una portería de fútbol que hace de portal y la familia de la Natividad va equipada con los colores del Athletic de Bilbao. Las sorpresas se suceden, como las anécdotas sobre su origen, entre ellas que estuvo a punto de perder un avión en Miami por querer comprar un belén elaborado con mazorcas de maíz. «Los hacían gallegos que emigraron a EEUU y vieron que allí solo había Papás Noel», dice la compatriota residente en la isla, cuyas figuras acapararon este jueves buena parte de la atención en la apertura del Jai de Nadal.
Exposición de belenes en el Jai de Nadal del Centro de Historia y Cultura Militar de Palma
B. Ramon
Su último belén, adquirido este mismo año «por su originalidad», se parece a las piezas del popular videojuego Tetris, aunque hay muchas más peculiaridades en la extensa colección de nacimientos de Pilar Vázquez, que supera el millar, procedentes de casi todo el mundo. Tiene uno donde el niño Jesús, la Virgen María y San José se encuentran en el interior de una cáscara de centollo. «Me lo comí en un viaje a Galicia, guardé el caparazón y el belenista Pere Costa se encargó de crearlo», tal como explica. Y otro está en una portería de fútbol que hace de portal y la familia de la Natividad va equipada con los colores del Athletic de Bilbao. Las sorpresas se suceden, como las anécdotas sobre su origen, entre ellas que estuvo a punto de perder un avión en Miami por querer comprar un belén elaborado con mazorcas de maíz. «Los hacían gallegos que emigraron a EEUU y vieron que allí solo había Papás Noel», dice la compatriota residente en la isla, cuyas figuras acapararon este jueves buena parte de la atención en la apertura del Jai de Nadal.
Exposición de belenes en el Jai de Nadal del Centro de Historia y Cultura Militar de Palma
B. Ramon
Su último belén, adquirido este mismo año «por su originalidad», se parece a las piezas del popular videojuego Tetris, aunque hay muchas más peculiaridades en la extensa colección de nacimientos de Pilar Vázquez, que supera el millar, procedentes de casi todo el mundo. Tiene uno donde el niño Jesús, la Virgen María y San José se encuentran en el interior de una cáscara de centollo. «Me lo comí en un viaje a Galicia, guardé el caparazón y el belenista Pere Costa se encargó de crearlo», tal como explica. Y otro está en una portería de fútbol que hace de portal y la familia de la Natividad va equipada con los colores del Athletic de Bilbao. Las sorpresas se suceden, como las anécdotas sobre su origen, entre ellas que estuvo a punto de perder un avión en Miami por querer comprar un belén elaborado con mazorcas de maíz. «Los hacían gallegos que emigraron a EEUU y vieron que allí solo había Papás Noel», dice la compatriota residente en la isla, cuyas figuras acapararon este jueves buena parte de la atención en la apertura del Jai de Nadal.
Exposición de belenes en el Jai de Nadal del Centro de Historia y Cultura Militar de Palma
B. Ramon
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B. Ramon
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B. Ramon
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B. Ramon
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B. Ramon
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Su último belén, adquirido este mismo año «por su originalidad», se parece a las piezas del popular videojuego Tetris, aunque hay muchas más peculiaridades en la extensa colección de nacimientos de Pilar Vázquez, que supera el millar, procedentes de casi todo el mundo. Tiene uno donde el niño Jesús, la Virgen María y San José se encuentran en el interior de una cáscara de centollo. «Me lo comí en un viaje a Galicia, guardé el caparazón y el belenista Pere Costa se encargó de crearlo», tal como explica. Y otro está en una portería de fútbol que hace de portal y la familia de la Natividad va equipada con los colores del Athletic de Bilbao. Las sorpresas se suceden, como las anécdotas sobre su origen, entre ellas que estuvo a punto de perder un avión en Miami por querer comprar un belén elaborado con mazorcas de maíz. «Los hacían gallegos que emigraron a EEUU y vieron que allí solo había Papás Noel», dice la compatriota residente en la isla, cuyas figuras acapararon este jueves buena parte de la atención en la apertura del Jai de Nadal.