34 personas han sido asesinadas en Tailandia en un ataque con arma y cuchillo en una guardería. Entre las víctimas había 22 niños. Las autoridades hicieron guardia frente al centro mientras cubrían con sábanas los cuerpos. El presunto asesino se quitó la vida después de matar a su esposa y a su hijo. Se trata de un ex policía que había sido dado de baja del servicio el año pasado por motivos relacionados con las drogas. El primer ministro tailandés ya ha expresado sus condolencias a través de Twitter. Una tragedia que podría haber sido incluso peor ya que en la guardería había mucho menos niños de lo habitual por las inundaciones que llevan días asolando el país.