El fotógrafo ‘santacataliner’ Pep Pérez Castelló retrata en ‘Arrabal’ la resistencia de siete vecinas de una barriada que ha mutado tanto que apenas ya la reconocen. El tiempo se ha detenido en sus casas, pero fuera todo es cambio y bullicio
Magdalena sentada en una butaca de su sala de estar.
Pep Pérez Castelló
El fotógrafo ‘santacataliner’ Pep Pérez Castelló retrata en ‘Arrabal’ la resistencia de siete vecinas de una barriada que ha mutado tanto que apenas ya la reconocen. El tiempo se ha detenido en sus casas, pero fuera todo es cambio y bullicio
Alvina toca su violín.
Pep Pérez Castelló
El fotógrafo ‘santacataliner’ Pep Pérez Castelló retrata en ‘Arrabal’ la resistencia de siete vecinas de una barriada que ha mutado tanto que apenas ya la reconocen. El tiempo se ha detenido en sus casas, pero fuera todo es cambio y bullicio
Betriz sentada en su casa.
Pep Pérez Castelló
El fotógrafo ‘santacataliner’ Pep Pérez Castelló retrata en ‘Arrabal’ la resistencia de siete vecinas de una barriada que ha mutado tanto que apenas ya la reconocen. El tiempo se ha detenido en sus casas, pero fuera todo es cambio y bullicio
Aurora mira la ventana desde el salón de su casa
Pep Pérez Castelló
El fotógrafo ‘santacataliner’ Pep Pérez Castelló retrata en ‘Arrabal’ la resistencia de siete vecinas de una barriada que ha mutado tanto que apenas ya la reconocen. El tiempo se ha detenido en sus casas, pero fuera todo es cambio y bullicio
Las fotos de Paquita cuando era joven
Pep Pérez Castelló
El fotógrafo ‘santacataliner’ Pep Pérez Castelló retrata en ‘Arrabal’ la resistencia de siete vecinas de una barriada que ha mutado tanto que apenas ya la reconocen. El tiempo se ha detenido en sus casas, pero fuera todo es cambio y bullicio
Otra imagen de Alvina desde el ático de su casa.
Pep Pérez Castelló
El fotógrafo ‘santacataliner’ Pep Pérez Castelló retrata en ‘Arrabal’ la resistencia de siete vecinas de una barriada que ha mutado tanto que apenas ya la reconocen. El tiempo se ha detenido en sus casas, pero fuera todo es cambio y bullicio
Paquita con su perro sentada en el sofá de su vivienda.
Pep Pérez Castelló
El fotógrafo ‘santacataliner’ Pep Pérez Castelló retrata en ‘Arrabal’ la resistencia de siete vecinas de una barriada que ha mutado tanto que apenas ya la reconocen. El tiempo se ha detenido en sus casas, pero fuera todo es cambio y bullicio
Conchita mira por el ventanal de su casa.
Pep Pérez Castelló
El fotógrafo ‘santacataliner’ Pep Pérez Castelló retrata en ‘Arrabal’ la resistencia de siete vecinas de una barriada que ha mutado tanto que apenas ya la reconocen. El tiempo se ha detenido en sus casas, pero fuera todo es cambio y bullicio
Conchita cuando era pequeña en un cuadro.
Pep Pérez Castelló
El fotógrafo ‘santacataliner’ Pep Pérez Castelló retrata en ‘Arrabal’ la resistencia de siete vecinas de una barriada que ha mutado tanto que apenas ya la reconocen. El tiempo se ha detenido en sus casas, pero fuera todo es cambio y bullicio
WhatsApp Image 2025-05-10 at 15.32.57 (1).jpeg
Pep Pérez Castelló
El fotógrafo ‘santacataliner’ Pep Pérez Castelló retrata en ‘Arrabal’ la resistencia de siete vecinas de una barriada que ha mutado tanto que apenas ya la reconocen. El tiempo se ha detenido en sus casas, pero fuera todo es cambio y bullicio
Magdalena en el salón de su casa.
Pep Pérez Castelló
El fotógrafo ‘santacataliner’ Pep Pérez Castelló retrata en ‘Arrabal’ la resistencia de siete vecinas de una barriada que ha mutado tanto que apenas ya la reconocen. El tiempo se ha detenido en sus casas, pero fuera todo es cambio y bullicio
Pep Pérez Castelló, autor de el proyecto 'Arrabal'
Pep Pérez Castelló
El fotógrafo ‘santacataliner’ Pep Pérez Castelló retrata en ‘Arrabal’ la resistencia de siete vecinas de una barriada que ha mutado tanto que apenas ya la reconocen. El tiempo se ha detenido en sus casas, pero fuera todo es cambio y bullicio
El fotógrafo ‘santacataliner’ Pep Pérez Castelló retrata en ‘Arrabal’ la resistencia de siete vecinas de una barriada que ha mutado tanto que apenas ya la reconocen. El tiempo se ha detenido en sus casas, pero fuera todo es cambio y bullicio