La urbanización de lujo de Son Vida está en plena expansión. Máquinas y obreros trabajan en la construcción de numerosas mansiones que van comiéndose la montaña y acercándose a la zona ANEI (Área Natural de Especial Interés). Los carteles de venta de solares forman parte del paisaje y hacen prever que donde hoy hay un espacio verde, o una pared rocosa, en un futuro habrá una villa más. Y en mitad de toda esta actividad y ruido de maquinaria, se esconde un parque público de 50.000 metros cuadrados con fuentes naturales, desconocido incluso para muchos residentes del barrio.
‘Boom’ constructivo en Son Vida
La urbanización de lujo de Son Vida está en plena expansión. Máquinas y obreros trabajan en la construcción de numerosas mansiones que van comiéndose la montaña y acercándose a la zona ANEI (Área Natural de Especial Interés). Los carteles de venta de solares forman parte del paisaje y hacen prever que donde hoy hay un espacio verde, o una pared rocosa, en un futuro habrá una villa más. Y en mitad de toda esta actividad y ruido de maquinaria, se esconde un parque público de 50.000 metros cuadrados con fuentes naturales, desconocido incluso para muchos residentes del barrio.
‘Boom’ constructivo en Son Vida
La urbanización de lujo de Son Vida está en plena expansión. Máquinas y obreros trabajan en la construcción de numerosas mansiones que van comiéndose la montaña y acercándose a la zona ANEI (Área Natural de Especial Interés). Los carteles de venta de solares forman parte del paisaje y hacen prever que donde hoy hay un espacio verde, o una pared rocosa, en un futuro habrá una villa más. Y en mitad de toda esta actividad y ruido de maquinaria, se esconde un parque público de 50.000 metros cuadrados con fuentes naturales, desconocido incluso para muchos residentes del barrio.
‘Boom’ constructivo en Son Vida
La urbanización de lujo de Son Vida está en plena expansión. Máquinas y obreros trabajan en la construcción de numerosas mansiones que van comiéndose la montaña y acercándose a la zona ANEI (Área Natural de Especial Interés). Los carteles de venta de solares forman parte del paisaje y hacen prever que donde hoy hay un espacio verde, o una pared rocosa, en un futuro habrá una villa más. Y en mitad de toda esta actividad y ruido de maquinaria, se esconde un parque público de 50.000 metros cuadrados con fuentes naturales, desconocido incluso para muchos residentes del barrio.
‘Boom’ constructivo en Son Vida
La urbanización de lujo de Son Vida está en plena expansión. Máquinas y obreros trabajan en la construcción de numerosas mansiones que van comiéndose la montaña y acercándose a la zona ANEI (Área Natural de Especial Interés). Los carteles de venta de solares forman parte del paisaje y hacen prever que donde hoy hay un espacio verde, o una pared rocosa, en un futuro habrá una villa más. Y en mitad de toda esta actividad y ruido de maquinaria, se esconde un parque público de 50.000 metros cuadrados con fuentes naturales, desconocido incluso para muchos residentes del barrio.
‘Boom’ constructivo en Son Vida
La urbanización de lujo de Son Vida está en plena expansión. Máquinas y obreros trabajan en la construcción de numerosas mansiones que van comiéndose la montaña y acercándose a la zona ANEI (Área Natural de Especial Interés). Los carteles de venta de solares forman parte del paisaje y hacen prever que donde hoy hay un espacio verde, o una pared rocosa, en un futuro habrá una villa más. Y en mitad de toda esta actividad y ruido de maquinaria, se esconde un parque público de 50.000 metros cuadrados con fuentes naturales, desconocido incluso para muchos residentes del barrio.
‘Boom’ constructivo en Son Vida
La urbanización de lujo de Son Vida está en plena expansión. Máquinas y obreros trabajan en la construcción de numerosas mansiones que van comiéndose la montaña y acercándose a la zona ANEI (Área Natural de Especial Interés). Los carteles de venta de solares forman parte del paisaje y hacen prever que donde hoy hay un espacio verde, o una pared rocosa, en un futuro habrá una villa más. Y en mitad de toda esta actividad y ruido de maquinaria, se esconde un parque público de 50.000 metros cuadrados con fuentes naturales, desconocido incluso para muchos residentes del barrio.
‘Boom’ constructivo en Son Vida
La urbanización de lujo de Son Vida está en plena expansión. Máquinas y obreros trabajan en la construcción de numerosas mansiones que van comiéndose la montaña y acercándose a la zona ANEI (Área Natural de Especial Interés). Los carteles de venta de solares forman parte del paisaje y hacen prever que donde hoy hay un espacio verde, o una pared rocosa, en un futuro habrá una villa más. Y en mitad de toda esta actividad y ruido de maquinaria, se esconde un parque público de 50.000 metros cuadrados con fuentes naturales, desconocido incluso para muchos residentes del barrio.
La urbanización de lujo de Son Vida está en plena expansión. Máquinas y obreros trabajan en la construcción de numerosas mansiones que van comiéndose la montaña y acercándose a la zona ANEI (Área Natural de Especial Interés). Los carteles de venta de solares forman parte del paisaje y hacen prever que donde hoy hay un espacio verde, o una pared rocosa, en un futuro habrá una villa más. Y en mitad de toda esta actividad y ruido de maquinaria, se esconde un parque público de 50.000 metros cuadrados con fuentes naturales, desconocido incluso para muchos residentes del barrio.