La operación para devolverle el brillo de antaño a Can Oleza ya ha empezado. Una empresa de transportes y varios trabajadores estuvieron durante toda la mañana de ayer cargando camiones con los muebles, tesoros y otros objetos del casal gótico de la calle Morei de Palma, un palacio declarado monumento histórico-artístico en 1973 cuyo deterioro ya no podía ocultarse tras la tela amarilla envuelta en su fachada
Can Oleza saca sus tesoros para ponerse a punto
B. Ramon
La operación para devolverle el brillo de antaño a Can Oleza ya ha empezado. Una empresa de transportes y varios trabajadores estuvieron durante toda la mañana de ayer cargando camiones con los muebles, tesoros y otros objetos del casal gótico de la calle Morei de Palma, un palacio declarado monumento histórico-artístico en 1973 cuyo deterioro ya no podía ocultarse tras la tela amarilla envuelta en su fachada
Can Oleza saca sus tesoros para ponerse a punto
B. Ramon
La operación para devolverle el brillo de antaño a Can Oleza ya ha empezado. Una empresa de transportes y varios trabajadores estuvieron durante toda la mañana de ayer cargando camiones con los muebles, tesoros y otros objetos del casal gótico de la calle Morei de Palma, un palacio declarado monumento histórico-artístico en 1973 cuyo deterioro ya no podía ocultarse tras la tela amarilla envuelta en su fachada
Can Oleza saca sus tesoros para ponerse a punto
B. Ramon
La operación para devolverle el brillo de antaño a Can Oleza ya ha empezado. Una empresa de transportes y varios trabajadores estuvieron durante toda la mañana de ayer cargando camiones con los muebles, tesoros y otros objetos del casal gótico de la calle Morei de Palma, un palacio declarado monumento histórico-artístico en 1973 cuyo deterioro ya no podía ocultarse tras la tela amarilla envuelta en su fachada
Can Oleza saca sus tesoros para ponerse a punto
B. Ramon
La operación para devolverle el brillo de antaño a Can Oleza ya ha empezado. Una empresa de transportes y varios trabajadores estuvieron durante toda la mañana de ayer cargando camiones con los muebles, tesoros y otros objetos del casal gótico de la calle Morei de Palma, un palacio declarado monumento histórico-artístico en 1973 cuyo deterioro ya no podía ocultarse tras la tela amarilla envuelta en su fachada
Can Oleza saca sus tesoros para ponerse a punto
B. Ramon
La operación para devolverle el brillo de antaño a Can Oleza ya ha empezado. Una empresa de transportes y varios trabajadores estuvieron durante toda la mañana de ayer cargando camiones con los muebles, tesoros y otros objetos del casal gótico de la calle Morei de Palma, un palacio declarado monumento histórico-artístico en 1973 cuyo deterioro ya no podía ocultarse tras la tela amarilla envuelta en su fachada
Can Oleza saca sus tesoros para ponerse a punto
B. Ramon
La operación para devolverle el brillo de antaño a Can Oleza ya ha empezado. Una empresa de transportes y varios trabajadores estuvieron durante toda la mañana de ayer cargando camiones con los muebles, tesoros y otros objetos del casal gótico de la calle Morei de Palma, un palacio declarado monumento histórico-artístico en 1973 cuyo deterioro ya no podía ocultarse tras la tela amarilla envuelta en su fachada
Can Oleza saca sus tesoros para ponerse a punto
B. Ramon
La operación para devolverle el brillo de antaño a Can Oleza ya ha empezado. Una empresa de transportes y varios trabajadores estuvieron durante toda la mañana de ayer cargando camiones con los muebles, tesoros y otros objetos del casal gótico de la calle Morei de Palma, un palacio declarado monumento histórico-artístico en 1973 cuyo deterioro ya no podía ocultarse tras la tela amarilla envuelta en su fachada
Can Oleza saca sus tesoros para ponerse a punto
B. Ramon
La operación para devolverle el brillo de antaño a Can Oleza ya ha empezado. Una empresa de transportes y varios trabajadores estuvieron durante toda la mañana de ayer cargando camiones con los muebles, tesoros y otros objetos del casal gótico de la calle Morei de Palma, un palacio declarado monumento histórico-artístico en 1973 cuyo deterioro ya no podía ocultarse tras la tela amarilla envuelta en su fachada
Can Oleza saca sus tesoros para ponerse a punto
B. Ramon
La operación para devolverle el brillo de antaño a Can Oleza ya ha empezado. Una empresa de transportes y varios trabajadores estuvieron durante toda la mañana de ayer cargando camiones con los muebles, tesoros y otros objetos del casal gótico de la calle Morei de Palma, un palacio declarado monumento histórico-artístico en 1973 cuyo deterioro ya no podía ocultarse tras la tela amarilla envuelta en su fachada
Can Oleza saca sus tesoros para ponerse a punto
B. Ramon
La operación para devolverle el brillo de antaño a Can Oleza ya ha empezado. Una empresa de transportes y varios trabajadores estuvieron durante toda la mañana de ayer cargando camiones con los muebles, tesoros y otros objetos del casal gótico de la calle Morei de Palma, un palacio declarado monumento histórico-artístico en 1973 cuyo deterioro ya no podía ocultarse tras la tela amarilla envuelta en su fachada
Can Oleza saca sus tesoros para ponerse a punto
B. Ramon
La operación para devolverle el brillo de antaño a Can Oleza ya ha empezado. Una empresa de transportes y varios trabajadores estuvieron durante toda la mañana de ayer cargando camiones con los muebles, tesoros y otros objetos del casal gótico de la calle Morei de Palma, un palacio declarado monumento histórico-artístico en 1973 cuyo deterioro ya no podía ocultarse tras la tela amarilla envuelta en su fachada
Can Oleza saca sus tesoros para ponerse a punto
B. Ramon
La operación para devolverle el brillo de antaño a Can Oleza ya ha empezado. Una empresa de transportes y varios trabajadores estuvieron durante toda la mañana de ayer cargando camiones con los muebles, tesoros y otros objetos del casal gótico de la calle Morei de Palma, un palacio declarado monumento histórico-artístico en 1973 cuyo deterioro ya no podía ocultarse tras la tela amarilla envuelta en su fachada
Can Oleza saca sus tesoros para ponerse a punto
B. Ramon
La operación para devolverle el brillo de antaño a Can Oleza ya ha empezado. Una empresa de transportes y varios trabajadores estuvieron durante toda la mañana de ayer cargando camiones con los muebles, tesoros y otros objetos del casal gótico de la calle Morei de Palma, un palacio declarado monumento histórico-artístico en 1973 cuyo deterioro ya no podía ocultarse tras la tela amarilla envuelta en su fachada
La operación para devolverle el brillo de antaño a Can Oleza ya ha empezado. Una empresa de transportes y varios trabajadores estuvieron durante toda la mañana de ayer cargando camiones con los muebles, tesoros y otros objetos del casal gótico de la calle Morei de Palma, un palacio declarado monumento histórico-artístico en 1973 cuyo deterioro ya no podía ocultarse tras la tela amarilla envuelta en su fachada