Como casi todo en esta vida, hay móviles buenos y móviles malos. Y es por ello que, en lo que a teléfonos inteligentes se refiere, los caros lo son por algo. No hay smartphone de gama alta malo.
No seré yo, triste plumilla de sueldo manifiestamente mejorable, quien abogue por los fastos telefónicos de algunas marcas. Pero si se trata de ser honestos -y en esta casa, eso está por delante de todo-, hay que reconocer que los teléfonos más caros, los de gama alta, funcionan mucho mejor que los de gama baja, los medio pensionista, o los de nombres impronunciables. Y ese es el caso, justamente, del nuevo y flamante Samsung Galaxy Note 9 que se ha puesto hoy mismo a la venta en nuestro país.
Pese a salir hoy al mercado, durante las dos últimas semanas hemos tenido la oportunidad de probarlo de forma anticipada. Lo hemos hecho a conciencia y de nuevo queda patente que la gama Note de Samsung es de lo mejor que hay en el mercado. Y sí, pone “la gama”. Sin excepción. El explosivo Note 7 también era excepcional.
En esta ocasión el gigante coreano de la electrónica ha conseguido subir la apuesta en algunos campos de la telefonía haciendo que, por ejemplo, el Note 9 llegue a una inagotable capacidad de almacenamiento de 512 GB, 1 TB si añadimos tarjeta microSD.
El magnífico rendimiento de este nuevo terminal, uno de los más potentes que hay ahora mismo en la calle, ha llevado a Samsung a apostar comercialmente con fuerza por los videojuegos. Así ha sido como el título de moda, Fortnite, se ha convertido en parte fundamental del estreno del Note 9, coincidiento con el lanzamiento para los móviles Android del propio juego.
El lápiz inteligente se ha vuelto todavía más inteligente -y útil-, la cámara -doble- se ha mejorado, la grabacíon de vídeo es ahora superlativa y la batería es casi suficiente para todo un día de batalla intensa.
Pero posiblemente te sigues haciendo la misma pregunta de siempre: ¿cuál es el mejor smartphone del mercado? Y la respuesta es, también, la de siempre: el mejor teléfono del mercado es el que mejor se adapta a tus necesidades. Así de simple.
