Una pensión contributiva es una prestación económica otorgada por el sistema de Seguridad Social a las personas que han contribuido regularmente al mismo a lo largo de su vida laboral. Es un reflejo del esfuerzo y la dedicación de una persona para mantener su seguridad financiera en la jubilación o en situaciones de incapacidad o necesidad.
En España, el gasto en pensiones contributivas se sitúa en el 11,6% del Producto Interior Bruto (PIB) en los últimos 12 meses, hasta octubre. La nómina mensual de las prestaciones contributivas de la Seguridad Social en el mes de octubre fue de 12.075,3 millones de euros.
El Consejo de Ministros aprobó en diciembre un Real Decreto para la revalorización de las pensiones del sistema de la Seguridad Social, de Clases Pasivas y de otras prestaciones públicas para 2023. La subida, efectiva desde el 1 de enero, supone un incremento del 8,5% con carácter general de las pensiones del sistema de Seguridad Social y de Clases Pasivas del Estado.
Tipos de pensiones contributivas
Exiten varios tipos de pensiones contributivas, cada una destinada a satisfacer diferentes necesidades de los beneficiarios. Los tipos más comunes incluyen:
- Jubilación: La pensión de jubilación es la más conocida y se concede a las personas que alcanzan la edad de jubilación legal.
- Incapacidad Permanente: Esta pensión se otorga a las personas que, debido a una discapacidad, no pueden trabajar de forma permanente.
- Viudedad: La pensión de viudedad se otorga a cónyuges supervivientes tras el fallecimiento del cónyuge que contribuyó al sistema.
- Orfandad: Los hijos menores de edad o discapacitados de un beneficiario fallecido pueden recibir una pensión de orfandad.
- A favor de familiares: Esta pensión se otorga a familiares dependientes de un beneficiario fallecido, que no pueden trabajar.
Requisitos para acceder a una pensión contributiva
Para acceder a una pensión contributiva en España, es necesario cumplir ciertos requisitos, como haber cotizado al sistema durante un período mínimo y haber alcanzado la edad o estado de incapacidad correspondiente.
¿Cuánto dinero se puede recibir en una pensión contributiva?
En general, la pensión contributiva se obtiene al cotizar mínimo 15 años en tu vida laboral hasta un máximo de 37 años y 9 meses en 2023. Con la subida de las pensiones, la cifra de jubilación también se incrementará, llegando hasta 38 años y 6 meses.
Este aumento del 8,5% para 2023 es el resultado del índice de precios de consumo (IPC) medio entre diciembre de 2021 y noviembre de 2022, según la fórmula establecida en la Ley 20/2021 de garantía del poder adquisitivo de las pensiones, aprobada hace un año y acordada con los interlocutores sociales. De esta manera, se da cumplimiento a la recomendación 2ª del Pacto de Toledo, garantizando el poder adquisitivo de los pensionistas en base a la evolución del IPC.
En 2023 y según los últimos datos facilitados por la Seguridad Social, la pensión contributiva media -teniendo en cuenta todos los tipos- asciende a 1.195,1 euros mensuales.
La pensión media de jubilación del sistema, por su parte, es de 1.375,1 euros. Por regímenes, la pensión media de jubilación procedente del Régimen General es de 1.532,5 euros al mes, mientras que la más baja la registra el Régimen de Autónomos, de 915,8 euros/mes. La cuantía media de las nuevas altas de jubilación en el sistema ascendió en el mes de junio de 2023 (último dato) a 1.391,7 euros mensuales.
Asimismo, la pensión media de viudedad es de 852,07 euros al mes.
Diferencias entre una pensión contributiva y no contributiva
Es importante distinguir entre las pensiones contributivas y no contributivas, ya que las últimas se otorgan a personas sin recursos y no requieren cotizaciones previas.