Cuenta la historia que la primera vez que la palabra foot ball apareció en la prensa mallorquina fue un 5 de julio de 1894 en el diario La Almudaina. Es la primera muestra del interés del antecesor de la cabecera de Diario de Mallorca por el deporte rey. No sería hasta veinte años después cuando naciera el Alfonso XIII, pero desde aquel primer día en estas páginas se ha seguido con atención todo lo que rodeaba a este club fundado por Antonio Moner Giral con su directiva en la que estaban el tradicionalista José Quint Zaforteza, Mateo Palmer, José Llauger, Miquel Estades, Juan Ferrer, Rafael González, Alberto Elvira, Alberto Gomila, Pedro Barbarín, Antonio Vaquer, Fernando Pinillos y Joaquín Mascaró.

El acontecer diario del club rojillo que hoy cumple 100 años ha contado con el seguimiento de los periodistas de Diario de Mallorca y las cabeceras que le precedieron. Muchos han sido los nombres de los profesionales que han escrito sobre las páginas más brillantes y también las más tristes del club que jugó sus primeros partidos en el campo de Buenos Aires, lo hizo después en el Lluís Sitjar y ahora lo hace en Son Moix. Las primeras crónicas llevan la firma de Miguel Caldentey Calet, que relató los primeros éxitos que incluían varios campeonatos de Balears y ascensos a Segunda División como el de la temporada 1943/44. Crónicas de los partidos y de los triunfales recibimientos que se producían en el puerto tras cada una de aquellas hazañas. Con posterioridad le siguieron en el seguimiento de la actividad del equipo barralet los escritos de Lamberto Cortés, Avespa, que desde el Correo de Mallorca cantó lo acontecido con aquel equipo desde la época de la postguerra en adelante. De Avespa sería la crónica de aquel primer ascenso a Primera división logrado en el campo de Vallejo ante el Levante.

A la firma del mítico Avespa le siguieron en los años 60, 70 y 80 las de Lorenzo Ripoll y Marc Verger que contaron en sus crónicas ascensos y descensos, algún que otro intento de soborno, el primer encierro de un club de fútbol español y hasta la salvación del Mallorca gracias a las gestiones que en su día se hicieron con Pablo Porta, por aquel entonces presidente de la Federación. Verger fue hasta su jubilación el cronista habitual de los partidos del Mallorca, aunque también se encuentran relatos de Damià Caubet y alguna más esporádica de Paco Riutord, más centrado en el Atlético Baleares.

No hay que olvidar tampoco, a la hora de hablar del seguimiento hecho al Real Mallorca, de las crónicas del entorno del partido hechas por otros periodistas que han dejado su huella en Diario de Mallorca, José Antonio Rodríguez Hidalgo con su ‘Bloc de notas’ en el que pulsaba la opinión de los jugadores veteranos del Mallorca o el corrosivo ‘Bullit’ de Tomeu Garcías, azote de presidentes y jugadores, que se centraba en lo que algunos llaman ahora el “entorno”.

Llegados a los 90 y los años finales del siglo pasado toman el relevo del seguimiento rojillo las firmas que ahora siguen informando del equipo decano como Ricard Cabot o quien esto firma, Sebastià Adrover, Jaume Bauzà, Manolo Fernández y, esporádicamente, Toni Oliva, pero también las de Joan Rotger, que estuvo presente en partidos tan importantes como el ascenso de Vallecas, la final de Copa de Valencia o la de Birmingham, o las de Héctor Martín, antes de irse a encargarse de los asuntos de prensa de campeones mundiales como Jorge Lorenzo o Marc Marquez. No faltan los artículos de Matías Vallés, que ensalzan o demonizan todo lo que rodea al equipo rojillo, que protagoniza durante un periodo de 16 años seguidos en Primera las páginas más brillantes de su historia; ni la voz de la grada recogida por el incombustible Jaume Vallès.

La imagen gráfica

Pero la palabra de las crónicas de prensa no nos explicaría bien la historia del Mallorca en este siglo de vida si no viniera acompañada por la imprescindible imagen que han captado también los fotógrafos o redactores gráficos, como les gusta a algunos llamarlos.

Diario de Mallorca, en este apartado, ha contado con el lujo de tener a profesionales como Castells, Iñigo, Leonor o Miquel Massuti y ya en la actualidad con otros como el siempre brillante Bartolomé Ramón, Guillem Bosch, o Manu Mielniezuk, sin olvidar a Isaac Sutorras y Pere Antoni Mas. Pero sobre todo con Lorenzo y Torrelló, testigos privilegiados de los momentos con más historia del club rojillo. ¿Quién no recuerda sus fotos del ascenso en Logroño, la de un desatado Serra Ferrer celebrando a su primera final de Copa, o la caída del muro del Lluis Sitjar, por citar algunas? Son la mejor prueba de una labor profesional de primer nivel en este seguimiento de la actualidad del Mallorca por este diario, que ha cumplido un siglo y que continuará mientras la entidad siga siendo lo que es: la principal institución deportiva de la isla.