¿Qué importancia tiene la sostenibilidad y más concretamente la economía circular para RIU Hotels? 

Hablar de sostenibilidad y hoteles puede sonar contradictorio, ya que todo hotel, no importa la compañía o su tamaño, tiene un impacto sobre el medio ambiente y la comunidad local. En el departamento de RSC somos conscientes de esa realidad y los obstáculos que conlleva, sin embargo, nuestra máxima es lograr una actividad hotelera responsable, y para lograrlo nos comprometemos con proyectos que minimicen nuestros impactos negativos a nivel social y ambiental. En este sentido, la economía circular, además de suponer un impacto positivo para el medioambiente, también mejora nuestra actividad de diversas maneras. Por ejemplo, supone un ahorro en costes y es capaz de cambiar nuestra percepción de los residuos como elemento valorizado y con rendimiento.

Sobre los proyectos que menciona, ¿han realizado alguno de ellos en Mallorca?

En los últimos años nos hemos sumado a la iniciativa de «Hoteles Circulares», un proyecto en colaboración con TIRME y con otras cadenas hoteleras de Mallorca. Se trata de un proyecto para reducir, reaprovechar y reciclar al máximo los residuos orgánicos generados en dos de nuestros establecimientos hoteleros en Playa de Palma, el Riu Festival y el Riu San Francisco. Medimos los kilos de los residuos orgánicos que posteriormente se convierten en compost para distribuir a nuestros proveedores agrónomos que nos proveen de algunas frutas y verduras para los dos hoteles RIU que participan en este proyecto. Este año, por la pandemia no hemos podido llevarlo a cabo, pero lo esperamos retomar en 2022 con los 5 hoteles que tenemos en la Playa de Palma y a largo plazo implantarlo en el resto de hoteles en territorio español. Además, hace unos días junto a la FEHM y Mac Insular presentamos la primera certificación de ‘vertido mínimo’ en una reforma hotelera en Mallorca con el gran trabajo realizado en el Riu Concordia. 

¿Cómo surgió el proyecto de «vertido mínimo» junto a la FEHM y MAC Insular?

A finales de 2018, nos unimos a la FEHM y a MAC Insular como la primera cadena hotelera en apostar por este nuevo modelo sostenible y convertir la reforma del Riu Concordia en un hotel-laboratorio de gestión de residuos. En ese momento éramos muy conscientes del impacto ambiental que podrían tener los residuos de la obra del hotel Riu Concordia en el medio ambiente, sobre todo tras una reforma de esas características, por ello, la posibilidad de reducirlos al máximo era una oportunidad única para ser fieles a nuestro compromiso con la responsabilidad hotelera. Y también es una manera de garantizar que nuestros residuos no terminan contaminando por la garantía que supone una certificación, en el control de su gestión.

¿Qué tipo de residuos se generaron y cómo se evitó ese impacto ambiental del que habla?

En la obra llevada a cabo entre octubre de 2019 y mayo de 2020, se obtuvieron toneladas de escombros de diversos materiales como residuos de construcción y demolición (13.971 tn), electrodomésticos (971 kg) y residuos voluminosos o mobiliario (242 tn). De ellos se reciclaron 776 kg de electrodomésticos, además de muebles y otros enseres voluminosos que se clasificaron en reparables y no reparables. En aquellos que no podían tener una segunda vida útil se recuperaron componentes valorizables como hierro, madera, plásticos, etc. En el caso de los muebles, fueron cedidos a la Fundación Deixalles, para su posterior venta de segunda mano. Por último, contábamos con material corporativo desfasado como ropa de cama, toallas, textiles variados, menaje, o cubertería. Una parte se ha repartido en alojamientos corporativos en destinos como Formentera y el resto se donó a la Cruz Roja de Mallorca.

¿Cuál ha sido el resultado de este proyecto? ¿Ha merecido la pena?

Totalmente. Hemos sido pioneros en Mallorca de la certificación «vertido mínimo» de Mac Insular que avala la trazabilidad total en la gestión de los residuos de obra. Pero lo más importante es que se han reciclado el 99% de los residuos generados que fueron más de 14.000 toneladas, desechando menos de un 1%. Y todo ello se ha conseguido gracias a una correcta trazabilidad de todos los escombros, evitando que no se gestionaran debidamente y que pudieran producir un impacto ambiental no deseado. 

¿Cree que la economía circular es una tendencia o ha venido para quedarse?

Es un factor que antes no se tenía en cuenta en la toma de decisiones de la compañía pero que ahora comienza a estar presente de una forma transversal en muchos de nuestros departamentos. Pero, seamos honestos, todavía hay mucho por hacer y aprender. En primer lugar, debemos esforzarnos en realizar una actividad circular que garantice la sostenibilidad de nuestra empresa a largo plazo. Para ello, por ejemplo, colaboramos con la Fundación Impulsa cuyo objetivo es convertir la hostelería en una actividad económica circular y con impacto positivo. Y es que como hoteleros y miembros del sector privado tenemos la responsabilidad de hacer que esa «moda», como la llaman algunos, se convierta en una realidad inamovible. Por eso, espero que este proyecto que hemos realizado en el Riu Concordia se convierta en un ejemplo multiplicador para otras empresas.

¿Qué pueden hacer los sectores económicos en Mallorca para lograrlo?

Colaborar entre ellos y comprometerse en hacer las cosas bien. Si queremos reforzar la sostenibilidad de la actividad turística en Mallorca no existe otra manera. Con este proyecto que hemos realizado junto a la FEHM y MAC Insular, hemos demostrado que, si existe voluntad en las empresas y una correcta gestión, se puede garantizar la trazabilidad de todos los residuos y su mejor aprovechamiento. En mi opinión, iniciativas como esta son muy necesarias e incluso diría que urgentes, porque debemos empezar a buscar maneras de adaptar al 100% nuestra actividad turística a un modelo circular para hacer de nuestro sector, un sector sostenible e innovador.