Vivian Grunblatt fundó Mallorcaresidencia en 2005 con el objetivo de ofrecer un trato personalizado a los compradores suecos que buscaban casa en Mallorca. A pesar del pequeño parón vivido por la situación sanitaria, Grunblatt asegura que estos clientes no han cambiado de opinión respecto a Mallorca que sigue siendo un excelente lugar donde pasar sus vacaciones o teletrabajar.

¿Cuándo y por qué motivo decidió fundar una inmobiliaria?

Mallorcaresidencia empezó en 2005. Yo viví unos años entre Estocolmo y Palma y me di cuenta de que los suecos tenían interés en comprar una segunda vivienda en Mallorca pero no había una inmobiliaria que hablase su idioma y se adaptase a sus necesidades.

¿Qué servicios la diferencian de otras agencias?

Conocemos a nuestros clientes. Sabemos qué tipos de propiedades buscan los suecos y cómo vendérselas. La captación de clientes la realizamos fundamentalmente en Suecia. Por otro lado, también tenemos un departamento que asesora a promotores inmobiliarios de la isla en obras nuevas para que se adapten a las necesidades suecas.

Sus clientes son mayoritariamente escandinavos, ¿cómo los describiría?

Nuestros clientes tienen 50 años o más, están semijubilados y pasan aquí varios meses escapando del invierno en su país. Buscan sol y calidad de vida.

¿Qué tipo de propiedades demandan?

Quieren un tipo de vivienda muy concreto: principalmente áticos y pisos con terraza y orientación suroeste.

¿Están interesados en zonas concretas de la isla?

Buscan apartamentos que les permitan ir andando a cualquier sitio. Las zonas más solicitadas ahora están entre Palma e Illetes o Ciudad Jardín.

¿Por qué cree que irrumpieron en Mallorca los compradores de esta nacionalidad?

Mallorca es el destino preferido y perfecto para los suecos desde hace muchos años. Aquí pueden descansar, relajarse y disfrutar de un paisaje muy bien conservado pero al mismo tiempo muy activo. Es un destino cercano y seguro.

¿Cómo ha evolucionado la demanda de estos clientes? ¿Sigue siendo alta?

Las ventas de pisos a ciudadanos nórdicos con alto poder adquisitivo se han incrementado hasta un 30% en los últimos tres años. La tendencia sigue al alza.

¿Cómo se presenta la temporada tras un año tan especial a causa de la covid-19?

Debido a las restricciones, pocos clientes se desplazan a la isla y por tanto hay menos compraventas. Pero lo importante es que vemos que la demanda sigue ahí. Los compradores suecos no han cambiado de idea. Siguen viendo en Mallorca una excelente oportunidad para pasar sus vacaciones y poder teletrabajar en un entorno privilegiado. 

¿Qué tendencias ha detectado ante la incertidumbre sanitaria?

El espacio exterior de la vivienda ha cobrado incluso más protagonismo. Tanto nuestros clientes residentes en la isla como los que vienen de fuera demandan una amplia terraza y una vivienda orientada al exterior.