Xisco Martorell, del PP, que accedió a la alcadía en noviembre de 2013 por dimisión de Guillem Crespí, tuvo que ceder ayer la vara de mando a Pep Lluís Urraca, del PSOE, después del pacto alcanzado entre los socialistas y Feim Santa Eugènia por el cual se repartirán la alcaldía del municipio dos años cada uno, por lo que a mitad de legislatura habrá nueva elección de alcalde en la localidad del Pla.