Antoni Solivellas es el alcalde que ayer estaba más tranquilo de toda la comunidad autónoma a la hora de la investidura. La totalidad del consistorio es de su partido, el PP. El salón de plenos contó con la presencia de unas 25 personas que aplaudieron cuando recibió la vara municipal. Solivellas reivindicó para su municipio una parte del pastel turístico pero apostando por un turismo sostenible.