El Pi concluyó ayer con el PP la primera tanda de reuniones con los partidos políticos que han obtenido representación en Sóller sin que los regionalistas hayan llegado a ningún principio de acuerdo. Jaume Bestard, el concejal que tiene la clave de la gobernabilidad del municipio, prevé llevar a cabo otra serie de reuniones internas y con los demás partidos en los próximos días.

El concejal electo explicó que con la reunión de ayer con el PP culminó una primera fase de contactos. En días anteriores mantuvo encuentros con el PSOE, Cs y Més per Sóller. Unidas Podemos (UP) ha delegado en la nacionalista Laura Celià la negociación de un pacto.

"Buena impresión"

Jaume Bestard afirmó ayer que se ha llevado "una buena impresión" de las reuniones y aseguró que "si por mi fuera cogería cosas buenas de todos los programas electorales" después de unas reuniones en las que El Pi se dedicó a "escuchar, ver y poner temas sobre la mesa".

El edil regionalista no quiso postularse públicamente acerca de las opciones que tiene un pacto hacia la izquierda o hacia la derecha algo que, según explicó, quedará en manos del comité local del partido.

La agrupación prevé celebrar una reunión interna para abordar el resultado de las reuniones y, a partir de ahí, iniciar una segunda tanda de negociaciones. El Pi prevé cerrar el pacto en el transcurso de la próxima semana. En principio, su objetivo es no agotar el tiempo disponible para las negociaciones antes del próximo día 15 de junio, fecha prevista para la constitución de los ayuntamientos.

El resultado de las elecciones ha hecho que El Pi pase a tener una notoria relevancia dado su papel de bisagra. Para un pacto de derechas es necesario sumar su voto junto con el de Cs y los siete del PP. Para virar hacia la izquierda necesita pactar con los cuatro ediles de Més, los tres del PSOE y con la concejal de UP.

Unidas Podemos ha delegado en la concejal electa de Més, Laura Celià, las negociaciones de cara a un posible pacto de las fuerzas de izquierdas con El Pi.