El regidor electo de Ciudadanos en Andratx, Gaspar Palmer, cuyo voto será decisivo a la hora de configurar una mayoría conservadora o de izquierdas en este municipio de Ponent, aseguró ayer que él está "abierto al diálogo con todo el mundo", a fin de encontrar "puntos de unión" en beneficio de los vecinos.

"Somos demócratas. El pueblo nos ha dado un mandato y, ahora, toca ponerse de acuerdo", manifestó el edil de Cs, sin avanzar todavía hacia qué lado se decantará. La jornada electoral del 26 de mayo dejó una victoria del Partido Popular de Estefanía Gonzalvo, que logró 1.089 votos y cinco regidores.

A la segunda plaza se aupó el PSIB-PSOE que, con una lista encabezada por Antoni Mir, consiguió cuatro actas de concejal (una más que en la convocatoria electoral de 2015). El Pi, por su parte, quedó en tercer lugar, con tres regidores, los mismos que Més-APIB.

El cuarto puesto fue para Cs, mientras que Podemos-EUIB también obtuvo representación por primera vez en el Consistorio de Son Mas, con un edil.

Balanza política

De esta forma, queda un panorama político en que Partido Popular y El Pi -que vienen de formar alianzas en pasadas legislaturas- y el bloque progresista (PSOE, Més y Podemos) suman cada uno el mismo número de regidores: ocho.

De ahí que Ciudadanos puede decantar la balanza hacia un lado o hacia el otro.

Cuando se le preguntó ayer a Palmer qué medidas considera prioritarias para la próxima legislatura, mencionó algunas de ellas, como la "disminución de la carga impositiva", la modernización de las herramientas electrónicas de la administración municipal y la realización de inversiones en el término municipal.

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