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Informe

Urbanismo, aparcamientos y servicios sociales centran el debate político en Andratx

El desarrollo de las normas subsidiarias, desafío para el futuro gobierno

Los diferentes grupos políticos, reunidos en sesión plenaria durante esta legislatura. lorenzo gutiérrez

Seis candidaturas optan en Andratx a ostentar la vara de mando municipal durante los próximos cuatro años: PP, Més, El Pi, PSIB-PSOE, Ciudadanos y Unidas Podemos. Una de las incógnitas de la jornada electoral del 26M pasa por saber si PP y El Pi sumarán lo necesario para reeditar el acuerdo de esta legislatura, por el cual Jaume Porsell y Katia Rouarch se alternaron en la alcaldía.

En esta ocasión, los populares estarán encabezados por la que ha sido regidora de Hacienda estos cuatro años, Estefanía Gonzalvo, con Porsell como número dos, mientras que Rouarch repetirá al frente de la lista regionalista con un morbo adicional: el exalcalde del PP Llorenç Suau le secunda en la candidatura.

Por su parte, Més -con Joan Manera de nuevo al frente- buscará repetir o superar sus buenos resultados de 2015, cuando fueron la segunda fuerza más votada (cinco ediles). El candidato socialista, Antoni Mir, se estrenará en estas lides electorales, mientras que Ciudadanos y Unidas Podemos -con Gaspar Palmer y Jonathan Castro, respectivamente- aspiran a alterar el tablero político tradicional en el municipio.

A expensas de cómo quede la distribución de fuerzas en el pleno tras el 26M, el futuro equipo de gobierno que salga de las urnas tendrá una amplia lista de deberes y tareas pendientes en diversos ámbitos del municipio.

Ordenación urbanística

Para empezar, está la ordenación urbanística, un tema siempre controvertido en Andratx dados los desmanes de pasadas legislaturas. En esta cuestión, ocupará un papel central la aprobación definitiva de las normas subsidiarias del municipio. Actualmente, las subsanaciones a las deficiencias que presentaba el documento se encuentran en exposición pública. El objetivo de este documento es clarificar una hoja de ruta urbanística tras los años del boom de la construcción.

Los problemas endémicos de estacionamiento en el término constituyen otro de los desafíos para la futura administración municipal. Habrá que ver en este sentido cómo evoluciona el plan para crear una zona de aparcamiento accesible en el núcleo turístico de Sant Elm, que cuenta con financiación del Govern.

Esta legislatura, además, el Ayuntamiento ha negociado la compra de varios solares para ubicar zonas de estacionamiento.

En el apartado de patrimonio, al futuro equipo de gobierno le tocará desarrollar un plan de gestión para la emblemática finca de Can Fasser.

En el año 2017 se oficializó la cesión por parte del Gobierno central y queda aún pendiente profundizar en un programa de dinamización y rehabilitación de la finca, en la que incluso se habló de ubicar un centro de interpretación del parque natural de sa Dragonera.

Otra de las claves para los próximos cuatro años es el capítulo de servicios sociales. Prácticamente todos los partidos coinciden en incluir en sus programas la necesidad de ampliar las plazas asistenciales para la tercera edad. En este sentido, es un clamor del municipio la necesidad de crear una residencia para mayores.

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