La Crida per Palma ha escenificado esta mañana en el barri de Ses Veles el precintado de un local de juego y apuestas para exigir "una regulación restrictiva que proteja a los jóvenes" ante "el exceso" de negocios de este tipo que han abierto en Palma, "una ciudad única en su permisividad ante el juego".

"Se ha normalizado que en cada barrio haya diversos locales de juego. Y no solo eso porque en los últimos tiempos han proliferado sin control", ha lamentado Laura Dorado, número 2 del partido al Ayuntamiento de Palma.

El local elegido por la Crida para ilustrar su rechazo a estos negocios se ubica "en las proximidades de un parque infantil, un colegio público y una guardería".

El partido, que se presenta por primera vez a unas elecciones municipales, ha recordado que en el archipiélago "más de un 25% de los jóvenes abandona su formación escolar sin ninguna titulación".

"Nos encontramos en la comunidad que lidera el abandono escolar en el Estado, y a su vez nuestra ciudad se permite el lujo de ser ciega a la problemática del juego", ha criticado la Crida per Palma.

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