"Probablemente me expulsen del partido por lo que voy a decir, pero es preciso para evitar que se trate de una forma dictatorial a las agrupaciones locales de otros pueblos". Con esta contundente frase abría ayer una rueda de prensa el que ha sido hasta hace pocos días coordinador de Ciudadanos en Inca, Bernat Vallori.

El responsable político denunció una situación de " mobbing.

"Le he insistido en varias ocasiones para que hablásemos sobre la candidatura y la lista electoral de Inca. Le remití una propuesta, incluso con fotos y aún espero respuesta", explicó.

Vallori agrega: "Hace unas semanas le hice saber por un amigo común la necesidad de hablar, puesto que no contestaba a mis llamadas, correos o mensajes de teléfono. En una corta entrevista me espetó que yo no me llevaba bien con el actual equipo de gobierno de Inca". Vallori sostiene que se quedó estupefacto: "Yo me llevo estupendamente a nivel personal, pero a nivel político debo criticar su gestión, o creía que para eso estábamos si aspiramos a ser alternativa". "Yo ante esta situación he optado por dimitir", finalizó.