Es la primera vez que una coalición nacionalista vence en unas elecciones municipales en Manacor. También la primera en que un partido de izquierdas consigue ganar en número de votos tras la restauración democrática. Las experiencias precedentes: hace dieciséis años con Miquel Riera al frente, y las anteriores de 1979 con Llorenç Mas y en 1987 con Jaume Llull, fueron fruto de pactos postelectorales. Y todo ello después de que hace solo cuatro años el Partido Popular consiguiera su primera mayoría absoluta en el municipio. Una legislatura da para mucho.

-Valore su gran victoria de anteanoche

-Mi valoración no puede ser más que positiva. Ha quedado demostrado que la gente pedía un cambio de rumbo político.

-¿Castigando al PP?

-Evidentemente, pero también con la voluntad de abrir un periodo basado en el hecho de saber escuchar.

-¿Se lo esperaba?

-Entraba dentro de nuestros mejores cálculos. Lo que sí nos ha sorprendido ha sido el descenso tan notorio del Partido Popular de Manacor; sus actuaciones, tanto autonómicas como locales les han pasado factura.

-¿Qué le dice que más del 22% de los electores les eligieran?

-Estoy muy contento y solo puedo dar las gracias por ello. Hemos obtenido casi 3.500 votos, lo que significa que son los mejores resultados de nuestra historia. Ahora se tratará de intentar formar equipo de gobierno durante las siguientes semanas.

-Los mejores de la formación y la primera vez que un partido de izquierdas gana en votos en Manacor.

-Creo que efectivamente es así, porque en 1987, cuando el PSOE consiguió la alcaldía de la mano de Jaume Llull, fue a través de un pacto con fuerzas de centro-izquierda para desbancar al PP de Gabriel Homar.

-¿Cuáles son las líneas rojas que no puede sobrepasar de cara a posibles pactos de gobierno?

-No se trata solo de líneas rojas. Es decir, siempre hemos dicho que debería obtener la alcaldía la lista más votada, pero como entenderá aún no hemos hablado con nadie sobre futuros pactos.

-¿Esperarán a que se defina primero el panorama autonómico?

-Tenemos hasta el próximo 13 de junio para integrar a otras fuerzas dentro de un proyecto común. Creo que no hay que apresurarse; sí, quizás sea bueno ver qué pasa a nivel autonómico.

-¿Partidario de un gobierno local lo más amplio posible?

-Debemos al menos intentar llegar a un consenso lo más amplio posible para que nos dé estabilidad durante cuatro años.

-¿Le darían la alcaldía a un posible partido-bisagra a cambio de su apoyo?

-La alcaldía no es un elemento de negociación para este partido. No habrá cambio de cromos en este sentido. Evidentemente todo dependerá de cómo vayan las negociaciones, pero nos sentimos con la fuerza suficiente incluso para gobernar en minoría si llega el caso y las negociaciones acaban sin pactos. No lo descarto.

-¿Así de claro?

-Como le decía hemos sido la fuerza más votada... podría suceder perfectamente.

-Sigo intentándolo, ¿Qué tal le suena un pacto con el PI (5) y el PSIB-PSOE (3)?

-Con el PSOE siempre hemos tenido una buena sintonía.

-¿Van a auditar las cuentas que deja Pastor?

-Así será, pero no para poner en duda nada, sino por una cuestión de justicia tras doce años de gobierno de la misma persona.

-¿Qué más?

-Crearemos un certificado que asegure que cumplimos los trámites administrativos con el ciudadano en un tiempo concreto. Debemos mejorar su percepción.

-¿Se acabarán las plazas de aparcamiento exclusivas para concejales frente al consistorio?

-No lo dude. Como tampoco descarte que sea yo mismo quien pinte las rayas negras para hacerlas desaparecer.

-¿Y la ORA?

-Debemos estudiarlo. Lo que está claro es que no puede ser una medida recaudatoria.

-¿El catalán volverá a ser requisito para ser funcionario municipal?

-Así será.