En el ayuntamiento de Llubí se vislumbra un pacto de centro-izquierda después de una legislatura conflictiva y difícil en la que el PP ha gobernado en minoría, con serias dificultades para sacar las propuestas adelante. El PI es el único partido que ha conseguido subir votos con respecto a 2011, pasando de uno a dos ediles que en la actual coyuntura serán básicos para la formación de cualquier ecuación política.

El candidato regionalista, Joan Ramis, es consciente de ello y asegura que tiene más posibilidades de formar un pacto de gobierno con Més, que mantiene los cuatro representantes de 2011, aunque con un menor apoyo electoral, que con el PP, partido que ha perdido 70 votos y un regidor.

Ramis afirmó ayer a este diario que, a pesar de que tiene intención de hablar con todos los portavoces, los ediles de Més per Llubí "tienen preferencia" porque ambas formaciones "han trabajado bien de forma conjunta en la oposición". Además, añade que la actitud del PP durante estos últimos años no ayuda a una posible entente. "Su política ha sido mala, sin consenso y llevando las cosas a escondidas; todo ello provoca un cierto resentimiento", indicó. Ramis no descarta la alcaldía, ya sea para toda la legislatura o repartida.