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Sobre ascuas

Las encuestas dan 2,5 diputados al PP

Es necesario recordar que solo dos partidos han conseguido diputados estatales por Balears en democracia, el continuo UCD/PP y el PSOE. Solo así puede entenderse la conmoción de que cinco formaciones aspiren razonablemente a un escaño el 20D, cuando únicamente hay ocho a repartir por otro atropello demográfico a la comunidad. La dificultad para cortar las tajadas obliga a repartos salomónicos. Así, Gadeso otorga la horquilla 3-2 a los populares, que arrebatarían el tercer asiento a Ciudadanos o a Més.

Las encuestas y las observaciones coinciden en adjudicar al PP exactamente 2,5 diputados, una cifra indiscutible pero imposible. El redondeo hasta tres supondría un fracaso en toda regla de los populares, hoy con cinco. Si bien la tradición hegemónica conservadora avala el trío, en las autonómicas recientes se sobrevaloró el poderío de la derecha. De resultas de este complejo, se puntuó generalmente al PP por encima de los 20 escuetos diputados al Parlament que acabaría por conseguir.

La encuesta de Gadeso resulta tristemente tranquilizadora para el PSOE, al consolidar los dos diputados que centran la aspiración de un partido que dos elecciones atrás doblaba esta cifra. El retroceso de Sánchez alcanza las costas de Balears. De nuevo, la adjudicación más exacta sería 1,5 escaños, también impracticable. Es posible que los socialistas estén más cerca del segundo escaño que los populares del tercero. Magro consuelo para la izquierda oficial.

A diferencia del CIS, la encuesta de Gadeso respeta el reparto entre izquierdas y derechas acreditado en los últimos tiempos en Balears. Dicho en negativo, parece difícil que PP (3) y Ciudadanos(2) sumen cinco escaños de ocho. El tercer diputado del PP empobrecería a Albert Rivera, y viceversa en el caso de un segundo escaño para los emergentes de derechas. Salvo un cambio ideológico masivo desde mayo, que ningún acontecimiento permite aventurar.

La encuesta otorga dos diputados a Podemos, lo cual constituiría un éxito sin precedentes para la izquierda alternativa. Mejoraría su cuota actual en el Parlament, de acuerdo con su vocación más estatal que autonómica. Espoleados por el éxito de su mitin del Palma Arena, los delegados de Pablo Iglesias presumen también de un 2,5, un impulso hacia un inverosímil tercer diputado. Excepto que cuenten con la colaboración desinteresada de Pedro Sánchez.

En su equilibrado reparto, Gadeso concede a Més un cuarenta por ciento de probabilidades de obtener un diputado en Madrid. Se han hecho apuestas vitales con menor esperanza, el abanico no puede estar más abierto. No son los encuestadores quienes se debaten entre múltiples opciones, sino los ciudadanos con el corazón partido en varios pedazos. La indecisión de uno de cada cuatro encuestados justifica los temblores en la asignación de escaños. La mitad de los dubitativos viajarán a la confortable abstención. Este concepto no existe. Abstenerse es votar al partido al que en ningún caso hubieras votado.

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