Podemos consiguió movilizar a miles de personas ayer en Mallorca. Fue el acto electoral más multitudinario de esta campaña. Pablo Iglesias levantó de sus sillas a las 5.000 personas presentes en el Palma Arena cuando habló de corrupción y cuando prometió que Balears merece ser tenida en cuenta "con una mejora de la financiación y un transporte público entre islas, para que viajar a Menorca o a Eivissa no salga más caro que hacerlo a la península".

Otro de los momentos clave de la intervención de Iglesias se produjo al referirse a los lobbies y poner como ejemplo a los "hoteleros" y a "los expresidentes y exministros que están en consejos de administración de grandes compañías, se dedican a hacer negocio con el petroleo y quieren prospecciones en Balears". Abogó por un cambio en el modelo productivo "de lobbies, burbujas inmobiliarias, pelotazos urbanísticos y energía nuclear".

El líder de Podemos pidió a los presentes que no olvidaran el Palma Arena, el "símbolo de los corrupción en estas islas" y tampoco "olviden los recortes". Acto seguido, aseveró que "se huele la remontada y con este señor juez (Juan Pedro Yllanes, candidato por Balears) también vamos a ganar las elecciones en estas islas".

Se mostró contundente con las llamadas "puertas giratorias". Anunció un plan contra la corrupción y que está dispuesto a cambiar la Constitución para acabar con las conexiones de los gobiernos con las grandes corporaciones. Asimismo, indicó que la corrupción en España "ha costado 48.000 millones y con este dinero podríamos pagar 83.000 plazas universitarias y 800.000 ingresos hospitalarios".

Pablo Iglesias también se refirió a la moción de confianza ciudadana a la que se someterá si es presidente cada dos años y que si no la supera se deberán convocar elecciones. También anunció un Plan de Transición Energética que creará unos 400.000 puestos de trabajo para el acondicionamiento de viviendas eficaces que ayuden a ahorrar unos 700 euros mensuales a las familias.

Errejón, Yllanes y Jarabo

Alberto Jarabo, líder de Podem Illes Balears, calentó el ambiente enumerando todos y cado uno de los casos de corrupción. El candidato por las islas, Juan Pedro Yllanes, auguró una "revolución con el único partido que puede hacerla, Podemos, porque somos los únicos donde se habla de amor y sonreímos". Yllanes denunció que el ministro de Justicia, Rafael Català, quiere echarle de la carrera judicial, "pero no lo conseguirá".

El número dos de Podemos, Iñigo Errejón, levantó al público cuando se refirió a lengua y a la movilización de las camisetas verdes contra el Partido Popular: "Se acabarán las amenazas a la lengua, porque la dignidad de un pueblo también está en su lengua y las islas salieron a la calle para defenderla".