El Pi no falla. Como hace cuatro años, volvieron a exhibir músculo en su acto central de campaña a diez días de las elecciones. Y eso, para los regionalistas, es un síntoma de que aguantan. Un argumento para desafiar con su poder territorial a las encuestas electorales. Los regionalistas rozaron el lleno en el Auditorium con unos 1.700 asistentes. "No necesitamos traer a nadie de Madrid para llenar, nos bastamos nosotros", presumió un enérgico Jaume Font, que, al ritmo de The final Countdown de Europe, levantó a su público para anunciar que "ha empezado la cuenta atrás" al 26M.

La idea era el Parc de la Riera, al aire libre; pero ante previsiones de lluvia, los regionalistas prefirieron no arriesgar y celebrarlo en un Auditorium llenado en dos ocasiones por Vox esta campaña. Los regionalistas no se arrugaron y no fallaron, rozando ayer el lleno con una sala magna casi abarrotada.

El mensaje claro: toca desafiar a las encuestas. Hace cuatro años, con los sondeos poniendo en duda su entrada quedaron a apenas medio centenar de votos de sacar cuatro diputados, quedándose en tres. "Si ahora nos dan entre 2 y 3 diputados, haced cuentas", hizo sus cábalas en el escenario el número dos al Consell, Antoni Amengual, que auguró "ser decisivos", pero que avisó que "si no lo somos tampoco pasa nada", relatando la acción de la formación estos cuatro años desde las instituciones. "No os fiéis de ninguna encuesta, ya hemos demostrado que podemos girar las encuestas", le siguió el candidato a Palma de los regionalistas, Josep Melià.

Melià hizo una férrea defensa del turismo y recordó que la "asignatura pendiente de El Pi es la capital": "La queremos aprobar". Por el escenario pasaron los principales cuadros -Xisca Mora, Antoni Amengual, Lina Pons, Neus Sánchez- y trataron de colocar los mensajes de El Pi: la defensa del pequeño comercio, del municipalismo, de la lengua...La número dos de Font, Lina Pons, cargó contra Vox, de cuyo líder Santiago Abascal dijo que le pone "los pelos como escarpias": "A mí nadie me dice si me puedo cortar el pelo, ni si me puedo pintar las uñas", reivindicó la periodista.

Y llegó el turno de Font. Si empezó la campaña convertido en Bruce Springsteen, la acabó ayer como una estrella, bajando entre el público al ritmo de Europe y entre gritos de "guapo". Ofreció argumentos para apuntalar la idea de desafiar a las encuestas: "El Pi no se presenta aquí de la nada", recordó, para añadir que "además este proyecto crece y tendrá resultados". El líder regionalista puso como objetivo que se compense la insularidad de Balears y advirtió que si son decisivos "para pactar el Govern pediremos que se lo hagan saber a los de Madrid".

Font prometió luchar contra los okupas o la venta ambulante y por el pago de la carrera profesional a los funcionarios interinos.

A partir de ahí repartió. Al PP: "Unos dicen 'Ho farem bé', nosotros también, o mejor". Al PSIB: "Otros dicen que 'Siempre adelante' y no han hecho ni una sola vivienda social". A Ciudadanos: "Otros dicen ¡Vamos! Y yo pido ¿dónde?". Y a Podemos: "Y hay que dicen 'La vida en el centro'. Estos ya se han perdido". Para cerrar el acto, The Best de Tina Turner.