Las caras de funeral dominaban entre los dirigentes del PP de Baleares que dirige Biel Company a raíz de la debacle electoral a nivel nacional y también en la Comunidad. El convertirse en la cuarta fuerza de las islas ha hecho mella entre la formación hegemónica de las islas hasta ayer. Company y los suyos no escondían su contrariedad por lo ocurrido. El presidente de los populares isleños y Margalida Prohens, la candidata al Congreso, calificaron los resultados de "malos". Y es que los populares han pasado de más de 163.000 votos de 2016 a escasos 87.000. Es la pérdida de casi el 50% de los sufragios, un 46%, y el propio Company reconoció con cara desencajada que es un "descalabro" y no se esperaban un resultado tan negativo.

"La fragmentación de la derecha ha favorecido a la izquierda y ahora nuestro trabajo será el de hacer ver a la ciudadanía lo que ocurre si se divide el voto. Es preciso que lo comprendan para las elecciones municipales y autonómicas", aseguró un Biel Company derrotado.

El presidente del PP compareció ayer noche, junto a Prohens y la ya senadora electa María Salom, con el 90% de los resultados. Sabían que la debacle electoral era ya un hecho. Company incidió en que las encuestas que ellos tenían ganaba el PSOE pero les daban mejores espectativas en Balears. No escondió su temor a que se produzca una situación similar el próximo 26 de mayo: "Es cierto que en las autonómicas y municipales se vota de otra forma y confiamos en que mejoremos los resultados. Pero también es cierto que la estrategia de movilización de la izquierda les ha funcionado". Pese a este temor, también aseguró que están "relativamente tranquilos" porque creen que en mayo la tendencia será muy diferente y los resultados estarán más igualados.

"Es una noche para hacer el análisis que hemos hecho, para sacar conclusiones y para hacer la segunda vuelta que haremos en las elecciones del 26 de mayo", indicó el líder de los populares isleños. El también candidato a la presidencia del Govern, agradecido el voto a las personas que han confiado en el PP y felicitó al partido socialista por el resultado cosechado en las islas y en toda España.

Marga Prohens

Por su parte, Margalida Prohens inició su intervenció relatando que había llamado a Pere Joan Pons, candidato del partido socialista, para felicitarle por la victoria. Añadió que sabían "lo difícil que lo teníamos por la tendencia a nivel nacional que se apuntaba, ya que se ha confirmado que la división de la derecha perpetuará a Pedro Sánchez en la Moncloa".

Margalida Prohens compareció ante los medios con los ojos vidriosos que evidenciaban el mal trago que estaba pasando por el batacazo de los resultados: "Asumimos que son unos malos resultados y entendemos que el ciudadano no se equivoca nunca, tendremos que hacer un análisis en el PP de lo que ha ocurrido en la jornada de hoy". La candidata del PP reiteró que "sabíamos que era complicado y que el escenario era difícil, pero nos mantenemos con resultados prácticamente idénticos a los obtenidos por el PP a nivel nacional".

Sin embargo, Prohens no daba crédito al batacazo y reflexionaba en voz alta: "Hasta en pueblos donde siempre hemos tenido mayoría absoluta nos hemos visto arrastrados por esta tendencia estatal, pero creemos que en las elecciones del 26 de mayo volveremos a tener los resultados que tradicionalmente ha tenido el PP", se consolaba la dirigente popular.

No obstante, la incertidumbre entre los populares es muy grande. Sus máximos dirigentes han apostado por analizar la tendencia a nivel nacional, pero algunos miembros de la cúpula del PP de las islas consideran que a nivel nacional se mantienen como segunda fuerza política, pero en las islas han bajado hasta la cuarta. Una debacle histórica, ya que el PP solo había dejado de ser la primera fuerza de Balears en una ocasión en todas las elecciones.

Sede desierta Los candidatos abandonaron

Candidatos como Miquel Ramis, que se presentaba para el Senado y no salió elegido, no comparecieron y se apuntó que ya se habían marchado de la sede de los populares. Una sede, la de la calle Palau Reial, que estaba casi desierta de militantes y simpatizantes. Lejos de lo vivido en otras elecciones donde cientos de militantes se acercaron para vivir la euforia de la noche electoral.

Los máximos dirigentes del PP estuvieron enclaustrados durante toda la noche. Allí estaban los candidatos y algunos dirigentes como la eurodiputada Rosa Estaràs. No se asomaron hasta que ya vieron que la derrota electoral era un hecho más que consumado.

Análisis, por Mateu Ferrer

EL PP balear solo gana cuando es regionalista

Perder su tercer diputado en favor de Vox ya era un drama para el PP balear; quedarse sin el segundo para que se lo lleve un Podemos con una candidata desconocida, es una debacle sin paliativos. El partido de Biel Company pierde en las islas casi 76.000 votos respecto a las últimas generales, y lo más increíble, pasa a ser la cuarta fuerza. El PP a la cola en Balears, se dice pronto. Pese al batacazo a nivel estatal, Pablo Casado se mantiene como segundo partido. Los populares aquí deberían analizar ahora si Biel Company supone más lastre que golpe de efecto.

El presidente del PP se burló de la encuesta del CIS que le vaticinaba el resultado obtenido. Dijo que era "de traca" que el sondeo otorgara 2 diputados a Podemos y 1 al PP, y que "Tezanos debería dejar de beber". Ayer admitió que sus encuestas internas daban la victoria al PSOE. Company debería hilvanar de una vez por todas un discurso propio para esta Comunidad. Saltó a la palestra para matar a Bauzá por españolista; prometió un giro regionalista, pero ha terminado abrazando otra vez el españolismo por el miedo a Vox. El PP balear no aprende.