Maria Salom ha sido la menos perjudicada de la debacle popular en Baleares y ha obtenido notables ventajas frente a sus compañeros de filas. Como candidata al Senado cosechó 7.804 votos más en Mallorca que la candidata de su formación al Congreso, Marga Prohens. La primera se hizo con 75.046 sufragios frente a los 62.242 de la segunda.

El respaldo a la inquera también sobresalió dentro de la candidatura a la Cámara Alta. Aunque fue sobrepasada por los socialistas Cosme Bonet y Susanna Moll, que lograron 106.804 y 102.056 votos, la popular obtuvo la tercera posición, con sus 75.046 sufragios. Un resultado que le distancia en querencia de su compañero de filas, Miquel Ramis, otro peso pesado del partido con dilatada experiencia en Madrid, que, con 63.678 votos, quedó en séptima posición, por detrás de los dos candidatos socialistas, los dos de Unidas Podemos, y de uno de los de Ciudadanos. La distancia entre ambos alcanza los 11.368 sufragios.

En este caso, cabe reseñar que Salom ocupaba dentro de las opciones populares la primera posición en la papeleta electoral, una posición inusual ya que normalmente se sigue el orden alfabético y por tanto hubiera correspondido a Ramis, quien no ha ocultado su enfado por esta alteración tras los comicios. Parte de esa ventaja de Salom podría proceder de votantes de Vox que han repartido el voto en el Senado, colocando una cruz en el candidato de su formación y otra en sucandidata favorita del PP.